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Pere Quintana (108 años): “he trabajado durante 37 años, pero como he llegado a esta edad, ya llevo más tiempo jubilado que en activo y para el Estado es un fracaso”

El anciano, que ha trabajado como farmacéutico en Barcelona, ha explicado sus secretos para seguir cumpliendo años y que son disfrutar de una “vida sencilla, pero buena”.

Pere Quintana durante la entrevista
Pere Quintana (108 años): “he trabajado durante 37 años, pero como he llegado a esta edad, ya llevo más tiempo jubilado que en activo y para el Estado es un fracaso” |Youtube La Vanguardia
Berta F. Quintanilla
Fecha de actualización:
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Pere Quintana está a punto de soplar las velas de su 109 cumpleaños y puede decir con orgullo que ha desarrollado una extensa carrera laboral como farmacéutico en Barcelona. Ahora disfruta de su merecida jubilación con una particularidad que ha explicado en una entrevista para La Vanguardia. Resalta que lleva más tiempo como jubilado del que ha estado en activo y afirma con ironía que su longevidad es “un fracaso para el Estado”, ironizando sobre el sistema de pensiones y cotizaciones de la Seguridad Social.

Con esto quiere decir que si hubiera muchos más jubilados con su edad, el sistema actual de pensiones dejaría de ser sostenible. Ha cotizado durante 37 años, en una farmacia, “como estoy viviendo tanto tiempo, hace ya más años que estoy jubilado sin trabajar que los que he pasado trabajando… esto es un fracaso para el Estado. ¡La Seguridad Social no se sostendría!”, ha afirmado bromeando.

A quienes le preguntan cómo se las apaña para llegar a la edad que tiene en perfecto estado, tanto físico como mental, él siempre responde lo mismo. “No existe una fórmula secreta ni mágica para llegar a mi edad”. “He perdido a amigos y familiares, pero lo he llevado con calma. La muerte forma parte de la vida. Lo importante es quedarse con el cariño que has dado y que has recibido”.

“Cuidé a mi mujer durante 23 años”

Uno de los recuerdos que le emocionan es el de su mujer, que sufrió un ictus y tuvo que ser atendida durante 23 años. “Era muy joven y la cuidé durante ese tiempo, fue complicado, pero acepté porque el amor verdadero se demuestra en estos momentos”.

Tiene cuatro hijos y siempre recuerda a su pareja con emoción. “El amor es compañía, me enseñó a respetar, a ser un hombre en el sentido pleno”. La familia se ha convertido en un pilar fundamental para él. “El cariño cambia de forma pero nunca desaparece”, explica cuando se acuerda del amor de sus hijos y de sus nietos. 

Su receta para la longevidad es infalible y aunque requiere de cierto sacrificio, se ha demostrado que funciona. “Moderación y humor, hay que comer poco, preocuparse menos y reírse más, incluso de uno mismo”.

Apunta que tuvo (y sigue conservando) muchas de sus aficiones entre las que destaca la música. “Aprendí a amarla desde pequeño, en casa era algo normal. Mi padre cantaba bien y lo hacía a menudo, era tenor, y cuando había cerca un piano, lo tocaba”.

“Llegar a mi edad no es un mérito, es un regalo”

El farmacéutico tiene claro que “vivir tanto no es un mérito, es un regalo, pero hay que saber disfrutarlo con humor y buena música”. “Vivir bien significa estar bien con tu familia y tener la economía arreglada, eso lo supe desde pequeño. Éramos 10 hermanos, así que la armonía en casa era fundamental. No llevábamos una vida fantástica, pero suficiente para vivirla con calma”.

“Creo que vivir tantos años es pura casualidad, me lo preguntan a menudo y siempre respondo que no existe una fórmula mágica”. Una de las cuestiones que más ha tenido que responder está relacionada con el deporte. “Cuando me dicen qué deporte he practicado, siempre les contesto que ninguno, nunca he hecho gimnasia, no me gustaba el fútbol ni salir de excursión, he sido de vida tranquila y quieta”, concluye.