Recibir una herencia del extranjero puede tener consecuencias fiscales en España. Puede darse el caso de alguien que, siendo de otras nacionalidades, ha fijado su residencia aquí y, en un momento dado, recibe su herencia del extranjero. ¿Qué obligaciones fiscales tendrían en España entonces y que pasos o trámites habría que seguir? Y es que saber cómo declarar una herencia recibida del extranjero es fundamental para hacer correctamente la declaración de la Renta.
Lo primero que se debe tener en cuenta es dónde está ubicada la residencia fiscal del heredero. La Ley del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) establece que, en términos generales, una persona es residente en territorio español si permanece durante más de 183 días de forma continuada en el año natural. Una vez que se ha confirmado que el heredero es residente fiscal en España, se deben responder tres preguntas.
La primera corresponde con: ¿Qué legislación le aplica?
La normativa será la Ley sobre el Impuesto de Sucesiones y Donaciones de la comunidad autónoma donde haya procedido a establecer su residencia el heredero. Si el difunto no tenía nacionalidad española, se aplicará acorde al procedimiento legal de su país de nacimiento. Normalmente, las personas traen la declaración notarial del notario o consulado de ese país.
“No obstante, esto ha cambiado con el Reglamento Europeo 650/2012 de Sucesiones Internacionales. A partir de la entrada en vigor, se le aplica a la herencia la ley del país donde tenía su residencia habitual el causante en el momento en que fallece Pero esto puede dar lugar a confusión y es por ello por lo que dicho Reglamento permite además que el testador pueda ordenar expresamente que se le aplique bien la ley del lugar donde residía o la ley de su nacionalidad. Para ello, es necesario que lo especifique el testador en el momento en que se redacta el testamento”, explica.
La segunda corresponde con: ¿Cómo hay que liquidar la herencia?
Habrá que tener presente que la liquidación de la herencia deberá hacerse ante la Agencia Estatal de la Administración tributaria. Es importante, por tanto, verificar que no se han pagado impuestos en otros países, ya que en ese caso es posible que podamos aplicar la deducción por doble imposición internacional, que evitará que se pague dos veces por la misma herencia.
La tercera corresponde con el plazo para liquidar la herencia
Este tiempo es de seis meses desde que falleció el causante que dio origen a la herencia. No obstante, es posible pedir una prórroga internacional de otros seis meses. Es importante notificar que la Agencia Tributaria no se encargará de notificarlos ni recordarlos al contribuyente.
Los requisitos para tramitar una herencia en el extranjero
Es importante que junto a la liquidación de la herencia se presenten todos los papeles traducidos al español. Un requisito fundamental. Por último, es debido puntualizar que el fisco español tiene cuatro años para inspeccionar la herencia. No obstante, si se trata de una herencia recibida en el extranjero, como es el caso, este plazo de cuatro años solo empezará a computar desde el momento en el que la Administración del país de residencia actual en el momento del proceso haya tenido conocimiento de la herencia porque se le ha presentado la documentación:
- Certificado de defunción.
- Certificado de Seguros de vida.
- Certificado de últimas voluntades.
- Localización del testamento.
- Acreditar la condición de extranjero.
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