La vida cada vez está más cara y llenar el depósito del coche afecta cada vez más al bolsillo del consumidor. Es por eso por lo que muchos conductores optan por repostar en gasolineras low cost convencidas de que el combustible es el mismo, solo que más barato.
Sin embargo, la diferencia de precio entre las estaciones de servicio tradicionales y las gasolineras low cost alimenta a muchos la sospecha de que lo barato puede salir caro y afectar negativamente a los motores. Ahora, el mecánico e influencer Morad, ha querido zanjar el asunto con una explicación sencilla que se ha hecho viral en redes.
“La gasolina low cost es lo mismo, la misma base. Lo que cambia son los aditivos”, resume el especialista. Según detalla, esos componentes extra, presentes en los combustibles de marca, “limpian los inyectores, alargan la vida del motor, mejoran la combustión y ayudan muchísimo a consumir mejor el combustible”. Es decir, el carburante barato no daña el motor, pero renuncia a los aditivos que mejoran su rendimiento y reducen el desgaste con el tiempo.
“No lo vas a notar en un día, pero a largo plazo sí que se nota muchísimo”
Morad insiste en que los efectos “no lo vas a notar en un día, pero a largo plazo sí que se nota muchísimo. Se notará en suciedad, en consumo, en desgaste…”.
“Sé que son tiempos difíciles”, expresa el mecánico consciente de la situación económica de muchos conductores y aunque no todos pueden permitirse llenar los depósitos del carburante más caro, lanza un consejo: “Cuando hagas un lleno de vez en cuando, échale aditivos que te ayuden a limpiar el motor”.
