Existen muchos trabajadores desempleados de larga duración que necesitan cobrar un subsidio por desempleo al sufrir una lesión y no encontrar trabajo. El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) es el organismo encargado de la gestión de esta ayuda de casi 500 euros y no permite que se cobre de primeras, si la persona no puede suscribir un compromiso de actividad. Únicamente es posible cuando ocurra una situación específica.
En este sentido, la asesora de la subdirección general del SEPE, Clara Martínez, recoge un escenario posible, por ejemplo, el de una persona que dude de si puede cobrar la Renta Activa de Inserción (RAI) al estar pendiente a una operación por sufrir una lesión.
En un primer momento, esta persona “lo tiene muy mal” porque la RAI está pensada para quienes han suscrito un compromiso de actividad y, además, demuestran que están en Búsqueda Activa de Empleo (BAE). Al mismo tiempo, solo pueden ser beneficiarios cuatro tipos de colectivos con dificultades para incorporarse al mercado laboral:
- Trabajadores con más de 45 años y de larga duración.
- Emigrantes retornados.
- Víctimas de violencia de género y doméstica.
- Persona con una discapacidad igual o superior al 65%.
Pero estos no son los únicos requisitos para cobrar esta ayuda de 480 euros (el 80% del IPREM). Como apunta Martínez, “este subsidio está pensado para quienes han suscrito un compromiso de actividad. Es necesario acreditar que se ha agotado el paro y el resto de subsidios ordinarios y en la fecha de solicitud que se han realizado al mínimo tres búsquedas activas de empleo (hacer entrevistas, apuntarse a los portales de empleo…)”.
A esto hay que sumar demostrar una carencia de rentas inferiores al 75% del Salario Mínimo Interprofesional (810 euros) y figurar como demandante de empleo durante todo el tiempo que se disfruta el subsidio.
¿Qué puede hacer una persona para disfrutar la RAI si tiene una lesión?
La asesora del SEPE explica que “no le queda más remedio que recuperarse de la lesión, cotizar un mínimo de 360 días para cobrar la prestación contributiva por desempleo, agotarlo, cobrar el subsidio que le corresponda, pertenecer a uno de los cuatro grupos mencionados, suscribir el compromiso de actividad y demostrar la BAE”.
Esta es la forma correcta para percibir directamente la RAI tanto si se tiene una lesión o no. Otra cuestión a tener presente es que, en caso de que haya sido concedida, la administración pública de empleo permitirá su disfrute durante 11 meses (si no cambia algún requisito) y puede cobrarse hasta en un máximo de tres ocasiones. Eso sí, deben pasar 365 días entre que finaliza un periodo y vuelve a solicitarse como periodo de carencia.
El objetivo es que la persona consiga un empleo lo más rápido posible y no tenga que estar durante tanto tiempo desempleada. Además, si se diera la situación en la que la persona tuviera 52 años o más y menos de 65 años, podría disfrutar directamente del subsidio para mayores de 52 años. “Algo ventajoso porque el cobro puede alargarse hasta que encuentra un nuevo empleo o alcanza la edad de jubilación”, añade Clara Martínez.
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