Así utilizan los bancos las tarjetas de débito, el medio de pago preferido por los españoles

Un estudio de la plataforma Solaris y la consultora Roland Berger afirma que el 47% de los consumidores utiliza la tarjeta de débito como servicio financiero integrado, que analizan para sus intereses las entidades bancarias y financieras.

pago con tarjeta
Cómo funciona el pago con tarjeta CANVA
Javier Martín

¿Sabías que la tarjeta de débito es el medio de pago preferido por los españoles? Así lo revela un estudio de la plataforma Solaris y la consultora Roland Berger, que analiza las tendencias de consumo y los hábitos financieros de los ciudadanos en España. Según el informe, el 47% de los consumidores utiliza la tarjeta de débito como servicio financiero integrado, lo que significa que pueden realizar compras, retirar efectivo, consultar saldos y transferir dinero desde una sola cuenta.

Le siguen muy de cerca el monedero digital, con un 43%, y la tarjeta de crédito, con un 41%, como concluye principalmente el documento, que también se centra en cómo las entidades financieras y bancarias han ubicado a las tarjetas de débito, uno de los productos y servicios más conocidos por todo el mundo por su uso rutinario, en el centro de su oferta. Así, se califican como “un buen punto de partida” para la fidelización de clientes.

"Son productos con los que los consumidores están más familiarizados [...] gracias a ellos, las empresas pueden conocer mejor a sus clientes, y fomentar su fidelización, mejorando su experiencia", se ha encargado de resumir el director de la sucursal española de Solaris, Gabriel Yermo.

¿Qué son las finanzas integradas que tienen las tarjetas de crédito?

Las finanzas integradas son una tendencia de los últimos años que consiste en ofrecer servicios financieros a través de plataformas digitales que integran diferentes productos y proveedores. Esta modalidad permite a los usuarios acceder a una mayor variedad de opciones, personalizar sus servicios y obtener mejores condiciones de control económico.

De esta forma, los usuarios pueden acceder a servicios como cuentas bancarias, tarjetas de crédito, préstamos, inversiones, seguros, pagos y transferencias, entre otros, desde una sola aplicación o sitio web.

Las ventajas de utilizar las finanzas integradas para facilitar el consumo

Entre los factores que impulsan el uso de estos servicios, el estudio destaca la facilidad y rapidez de acceso durante el proceso de compra (43%) y la mayor comodidad en comparación con la banca tradicional (38%). El estudio también analiza los sectores en los que se emplean más estos servicios financieros integrados, donde el comercio minorista encabeza, con más de la mitad de los usuarios, seguido por el turismo, donde casi el 45% de los consumidores ha utilizado estas herramientas para reservar viajes y alojamientos.

No obstante, también señala algunos retos y barreras para el desarrollo de estos servicios. Los consumidores expresan su preocupación por la seguridad digital (63%), la transparencia sobre los servicios (47%) y la confianza (39%) a la hora de contratar productos financieros integrados.

Se sabe que la tarjeta de débito es una forma cómoda y segura de pagar las compras sin tener que llevar dinero en efectivo. Además, permite controlar mejor tus gastos, ya que el importe se descuenta directamente de tu cuenta bancaria. Pero no son los únicos reclamos que la convierten en la opción más frecuentada. Algunas de las ventajas de la tarjeta de débito son:

  • No genera intereses ni comisiones, salvo que se utilice en cajeros automáticos de otras entidades.
  • Mayor aceptación que otros medios de pago, tanto en comercios físicos como online.
  • Ofrece mayor seguridad que el dinero en efectivo, ya que se puede bloquear en caso de pérdida o robo.
  • Permite acceder a servicios adicionales, como seguros, descuentos o programas de fidelización.

Aunque también presenta algunos inconvenientes, como que no permite aplazar el pago ni financiar las compras o que tiene un límite diario o mensual de gasto, que puede variar según la entidad emisora. Además, puede generar comisiones por mantenimiento o renovación, dependiendo del tipo de cuenta asociada. Por otro lado, tampoco es válida para alquilar un coche o reservar un hotel, ya que se suele exigir una tarjeta de crédito como garantía.

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