En España los contribuyentes están controlados por Hacienda para evitar el fraude fiscal y que se paguen los impuestos a tiempo. Por eso, la Agencia Tributaria tiene derecho a vigilar el móvil, siendo legal. No se utilizan aplicaciones espías, pero sí que se puede controlar todo lo que se compra gracias a la geolocalización del teléfono y la ‘Tasa Google’ que ya se está aplicando en España. Así también controla los cambios de domicilio y su impacto en las tributaciones.
Hace ya tiempo que la administración tributaria lleva tiempo empleando tecnología de última generación para controlar que se cumple con el Fisco. Los hace mediante métodos amparados en la Ley del Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales, especialmente en su artículo 7. Las herramientas legales para vigilar sería el rastreo por geolocalización y mediante la dirección IP.
Como recoge ese texto legal: “se presumirá que un determinado dispositivo de un usuario se encuentra en el lugar que se determine conforme a la dirección IP del mismo, salvo que pueda concluirse que dicho lugar es otro diferente mediante la utilización de otros medios de prueba admisibles en derecho, en particular, la utilización de otros instrumentos de geolocalización”.
En otras palabras, es legal que el Fisco espíe la localización de un móvil en concreto, lo que puede resultar muy útil para controlar el fraude fiscal en la campaña de la Renta.
¿Por qué controla Hacienda los cambios de domicilio a través de geolocalización?
El rastreo de dispositivos móviles por parte de la Agencia Tributaria tiene un objetivo claro: asegurarse de que existen cambios de domicilio que puedan influir en la recaudación. Para ello sirven todo tipo de aparatos electrónicos que tengan acceso a la ubicación de la persona, como móviles, ordenadores y otros dispositivos.
Por poner un ejemplo, una de las causas más comunes por las que se está haciendo este uso en las investigaciones a famosos, como los YouTubers que pueden cambiar su domicilio fiscal a Andorra para buscar menor presión fiscal.
Este Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales, la tasa Google, entró en vigor en 16 de enero de 2021 y desde ese momento puede aplicarse a todas las compañías que facturen más de 750 millones de euros en todo el mundo.
Cómo espía Hacienda a los contribuyentes para evitar el fraude fiscal
Al momento de localizar la ubicación de una persona, según el real decreto, se puede utilizar la geolocalización basada en la identificación de redes mediante WiFi o Ethernet. Al mismo tiempo, puede obtener esa geolocalización física mediante satélite, como el GPS incluido en los smartphones.
Otras vías por las que puede conocerse la ubicación es mediante la información facilitada por los sistemas de comunicaciones inalámbricas, como la GSM, las balizas y el Bluetooth. Eso sí, el espionaje de la administración pública tributaria solo tiene un fin y es evitar el fraude fiscal a toda costa.
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