Los presidentes de las principales asociaciones de trabajadores autónomos, Lorenzo Amor (ATA) y María José Landaburu (Uatae), piden al Gobierno una rebaja de las cuotas que pagan a la Seguridad Social aquellos autónomos que tienen ingresos muy bajos. Ambos han coincidido en que el actual sistema sigue resultando desproporcionado para los profesionales con rendimientos mínimos y que la revisión prevista para 2026 debería corregir esa situación, respondiendo así a la marcha atrás anunciada ayer por Elma Saiz sobre las cuotas de autónomos, la cual ven como “algo lógico” pero insuficiente aún.
En declaraciones a TVE, Amor consideró que la nueva tabla de cuotas planteada por el Ejecutivo “está más en la línea de lo que su organización había propuesto”, pero insistió en la necesidad de crear un tramo superreducido para aquellos autónomos con ingresos inferiores a los 400 euros. “Hay autónomos que ganando 400 euros no pueden pagar 200 euros. Desde nuestro punto de vista tendrían que cotizar 100 euros”, apuntó.
El presidente de ATA defendió que su propuesta para 2026 pasa por mantener las bases de cotización vigentes este año y, en todo caso, “aceptar que se pudiera llegar en el tramo más alto hasta el IPC, pero a partir de ahí no estamos de acuerdo”. En su opinión, “si hay posibilidad de bajar a los tramos más bajos, sobre todo al tramo primero, al reducido, estaríamos de acuerdo”.
Amor pide igualar la protección social de los autónomos con la de los asalariados y mejorar el cese de actividad
Amor, también vicepresidente de la CEOE, criticó que el Gobierno no haya equiparado todavía la protección social de los autónomos con la de los asalariados pese a que, según dijo, “los autónomos han cumplido con la recomendación quinta del Pacto de Toledo de cotizar por sus ingresos fiscales”.
“La prestación de paro llamada cese de actividad es una presunta estafa. Al 60% de los autónomos que lo solicitan se les deniega”, denunció, antes de añadir que las trabajadoras por cuenta propia mayores de 52 años “no tienen el subsidio asistencial, ni siquiera aquellas que viven en hogares monoparentales y con hijos”.
El dirigente de ATA reclamó asimismo corregir los errores de regularización de cuotas de 2023: “Cuando en marzo o abril los autónomos recibieron la resolución de la Seguridad Social, algunas tenían errores y no existía la posibilidad de reclamar administrativamente. Eso no puede ser. A esto hay que darle una solución”.
Amor insistió en simplificar los trámites administrativos: “Ayer tuvimos que hacer nuestra declaración trimestral de IVA, IRPF, pago a cuenta. Hombre, es inconcebible que todavía sigamos hablando de declaraciones trimestrales. Ya se podían hacer sólo dos”.
Pese a todo, se mostró dispuesto a negociar con el Ministerio de Inclusión y Seguridad Social, aunque advirtió: “Si no se mejora la protección social y los errores en las regularizaciones de cuotas, será muy difícil llegar a un acuerdo con el Gobierno”. Y añadió: “También creo que le va a ser difícil al Gobierno aprobar esto en el Congreso de los Diputados. Por las reacciones que vimos ayer, no las tiene todas consigo”.
Para Uatae es necesario bajar la cuota a los autónomos con ingresos más bajos
Por su parte, la secretaria general de Uatae, María José Landaburu, defendió que “el objetivo de la reforma de 2022 era que los autónomos más precarios pagasen menos a la Seguridad Social y estuviesen más protegidos”. Recordó que entonces “pagaban 290 euros al mes y ahora pagan 200”, y que el momento actual “era el adecuado para seguir bajando (la cuota) y proteger y mantener a las clases medias, a los estratos medios”.
Landaburu subrayó que “los que más ingresan tienen que tener un esfuerzo mayor, como hacen los asalariados”, y ejemplificó: “Pensemos que personas que están ganando 6.000 euros o más al mes están cotizando por un 10%, y 14 euros más, creo que pueden hacer el esfuerzo. Y, además, esos euros que paguen de más les van a proteger más”.

La dirigente de Uatae se mostró optimista ante la posibilidad de un acuerdo tras la rectificación del Ministerio de Elma Saiz en su propuesta inicial, que congelaba las cuotas para quienes menos ganan: “Si se ha rectificado en una semana, yo creo que se puede seguir avanzando por esta senda”.
Landaburu sugirió que el cambio de rumbo en el Ministerio responde “a una intervención superior”, pese a que la titular de Inclusión haya negado la implicación del presidente del Gobierno. “Yo sí que creo que ha habido una intervención superior. Que en el Gobierno se ha reflexionado y se ha dicho, ¿qué es esto? No puede ser que a todas las organizaciones de autónomos, con perfiles tan distintos, les parezca mal”.
La secretaria general de Uatae advirtió que el Ejecutivo deberá elegir “si hace una propuesta que sirva a los que menos tienen o si hace una propuesta al gusto de los que no quieren pagar nada más”. Y concluyó: “Al final es una cuestión también política. El Gobierno tendrá que ver si sus socios naturales, la parte más comprometida socialmente del Gobierno, tira o si deciden contentar a las patronales y no avanzar. Diseñamos una senda pero la senda, y lo dice claramente la ley y la exposición de motivos, habla de equidad y de progresividad y aquí hay regresión. Si el que tiene menos paga el 30% y el que gana más paga el 10%, algo no se está haciendo adecuadamente”.

