Claudia, madre de un hijo: “He estado de vacaciones en el típico hotel familiar para ir con niños y lo que me he encontrado me da vergüenza ajena”

Su vídeo viral pone en la diana a los padres que se desentienden de sus hijos estando de vacaciones y molestan a los demás huéspedes.

Mujer anónima frustrada en un hotel |Envato
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Laura solo quería pasar unos días de desconexión en un hotel pensado para familias con niños. Lo que no esperaba era salir de allí “con vergüenza ajena” por el comportamiento de algunos padres. Así lo cuenta ella misma en un vídeo que se ha hecho viral en redes sociales y que ha encendido el debate sobre la crianza en espacios compartidos.

Laura no apunta contra los niños, sino contra los adultos que, según relata, aprovechan el “todo incluido” vacacional para desentenderse por completo de la educación de sus hijos y el respeto que deben a los demás.

La protagonista afirma que “hay padres que se van de vacaciones a olvidarse de que tienen hijos”, y defiende que elegir la paternidad implica, precisamente, no renunciar a educar incluso en vacaciones: “Tener hijos no es una obligación. Cada uno los tiene porque quiere, porque puede y porque se siente preparado”, insiste la madre.

La letra pequeña del hotel para niños

Para Laura, el concepto de hotel familiar no puede ser excusa para despreocuparse de todo y dejar que los menores hagan y deshagan a su antojo: “En el concepto de hotel para niños no entra en letra pequeña: ‘de los cuales olvidarse mientras molestan a los demás’”, zanja.

La escena, según su testimonio, sería la siguiente: unos menores correteando sin control y padres ausentes que justifican la mala educación con frases como “es que es un niño”. Para ella, eso no es escusa y explica que “una cosa es que tu hijo sea un niño y otra cosa es que sea un niño maleducado. Son cosas muy diferentes”.

El problema, según apunta, es que muchas veces ni siquiera es posible hablar con los padres responsables porque, literalmente, “les han soltado en la piscina y han dicho: ‘Ancha Castilla, hijo, que te diviertas’”. La consecuencia es que otros huéspedes y adultos terminan asumiendo el papel de supervisores o teniendo que llamar la atención a los pequeños.

“Por no hablar de que la mayoría de estos niños maleducados no te queda otra que muy educadamente llamarles tú la atención, porque si tienes intención de hablar con sus padres, suerte en la vida si los encuentras”.

Laura insiste en que ser padre es un compromiso que no desaparece por cruzar la puerta de un hotel: “si lo que te mola es echarte la siesta y rascarte la pelotera en el sofá de tu casa, no tengas hijos y punto”, sentencia.

La polémica divide a las redes

El vídeo ha abierto el eterno debate sobre los límites de la paternidad, el respeto en lugares públicos y la importancia de la supervisión adulta, especialmente en esos destinos preparados para relajarse y descansar en vacaciones, que pueden convertirse en una auténtica jungla si cada uno va a lo suyo.

En los comentarios se pueden encontrar mensajes de quienes apoyan su denuncia y quienes la acusan de intolerante: “Hay hoteles only adult. Puedes ir ahí sin problema”, “Si no quieres que te moleste nadie mejor en tu casa”, “¿Qué es el término molestar? ¿Que jueguen?”, “Yo creo que lo que está diciendo se entiende perfectamente, no entiendo los comentarios”, “Muchísimos padres de hoy en día funcionan de esa manera y es una vergüenza total”, son algunos de los comentarios que se pueden leer.

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