El hombre que vive en una cápsula debajo del agua desde hace meses con un único objetivo

Lleva más de 60 días metido en una cápsula submarina frente a la costa de Puerto Lindo, en Panamá.

El hombre que vive en una cápsula debajo del agua desde hace meses con un único objetivo New York Post
Icíar Carballo

Se llama Rüdiger Koch, es alemán, ingeniero espacial, tiene 59 años y lleva más de 60 días en una cápsula submarina en las aguas del mar Caribe, frente a la costa de Puerto Lindo, en Panamá. Una misión que comenzó el pasado 26 de septiembre con la que planea regresar a tierra el próximo 24 de enero de 2025. Es decir, 120 días después.

Con un espacio habitable de casi 30 metros cuadrados a 36 pies debajo de la superficie, no apto para claustrofóbicos, Koch pasa los días acompañado de una televisión, un ordenador, una bicicleta fija y varios ventiladores, según explican desde ‘New York Post’. Todo ello acompañado de internet vía satélite y energía solar para poder comunicarse y sobrevivir.

Sin embargo, según ha confesado a ‘CBS News’,una ducha real y en condiciones es lo que más echa de menos, dejando así entrever qué será lo primero que haga cuando llegue a tierra firme. 

El objetivo de vivir debajo del agua

Sería impensable que esta misión no tuviera un motivo. Y es que Koch lo tiene claro: quiere romper el récord mundial Guinness por el mayor tiempo vivido en un hábitat fijo bajo el agua. Actualmente, este récord lo ostenta el estadounidense Joseph Dituri, con hasta 100 días viviendo debajo del agua frente a las costas de Key Largo, en Florida, entre marzo y junio de 2023. 

Por ello, el reto de Koch está en 20 días más. Y para ello, cuatro cámaras monitorean al alemán, capturando su vida diaria y proporcionando pruebas de que ha estado bajo el agua durante todo el tiempo, además de controlar su estado de salud a través de su equipo especializado. 

Cómo es la casa submarina

La cápsula donde Koch pretende romper el récord mundial Guinness es circular, un tubo vertical que se sumerge y cuenta con un baño portátil y con algunas ventanas que muestran las inmensidades del mar. A través del tubo, miembros de su equipo, que pueden verle a través de una de las cámaras, le proporcionan la comida.

Un entorno al que el alemán ya se ha acostumbrado y ahora asegura ser un espacio beneficioso para los seres humanos y para el medioambiente, destacando que la propia cápsula cuenta con un beneficio ambiental extra para la vida marina, ya que la cámara submarina actúa como un arrecife artificial y un refugio para los peces.

Archivado en:

Otras noticias interesantes

Lo más leído