Bélgica necesita soldados y por eso ha anunciado el envío de 149.000 cartas a jóvenes de 17 años que quieran alistarse en las Fuerzas Armadas y realizar el servicio militar (la mili) voluntario con un año de duración. Para hacerlo más atractivo, y para que pueda concebirse como una ocupación laboral (se firma un contrato de trabajo) ofrecen un salario de 2.000 euros netos al mes.
Ha sido el ministro de Defensa belga, Theo Francken, quien por medio de una publicación en su red social X ha dado a conocer esta iniciativa. Así, el representante del partido nacionalista flamenco N-VA apuntó a que ya se han enviado miles de cartas con las que invitan a los jóvenes de 17 años con nacionalidad belga a que se unan al Ejército. En caso de que no quieran un compromiso permanente, les animan a que hagan la mili que dura un año.
Una vez que reciban las solicitudes, el Gobierno belga seleccionará a 500 reclutas que serán los que completen el curso de formación. Y cuando hayan finalizado, se espera que abran la mente a “lo militar, ya que la defensa es una opción e incluso una oportunidad. El objetivo es concienciar a los jóvenes de que el mundo ha cambiado y de que existe una amenaza que pesa sobre el país”, ha señalado el ministro de Defensa en una entrevista con el diario Le Soir recogida por El País.
Qué pone la carta que están recibiendo miles de jóvenes
En la carta que están recibiendo en sus casas los ciudadanos se explica que la intención del Gobierno belga es la de aumentar el número de efectivos en el Ejército para estar mejor preparados en caso de conflicto. Según el diario La Libre, Defensa recluta a 2.800 soldados anuales, y tiene 6.500 reservistas.
La intención es conseguir 40.000 militares antes de 2030 y de momento, el número actual (26.000) queda bastante lejos. Así, en el mes de septiembre se aprobó una norma que se inspiraba en una similar que se está desarrollando en Países Bajos y en Alemania.
Cuando se reciban las solicitudes, quedará abierto el plazo para asistir a las sesiones informativas que serán presenciales y online para los que residan más lejos.
La intención es subir el número de plazas hasta las 7.000
Aunque en esta primera fase se buscan 500 soldados, cuando el procedimiento avance se esperan 1.000 en 2027 y 7.000 en los restantes. Una vez que estén dentro del Ejército, tendrán una formación militar de 10 semanas y luego se especializarán en tierra, mar o aire.
El ministro de Defensa ha recalcado que estas cartas son informativas y que no comprometen a nada a quien las recibe. “Cada uno puede ignorarla o interesarse por la propuesta, siempre siguiendo su ritmo”.
Cuando se hayan decidido y firmen el contrato, este sí tendrá carácter vinculante y los nuevos militares estarán bajo el Estatuto del Ejército.