Vodafone da un paso más para consolidarse en el mercado español, y renueva un histórico acuerdo mayorista que la empresa de telecomunicaciones mantiene con Telefónica desde 2017. A través de un pacto no vinculante, Vodafone “alquilará” las redes de fibra óptica de Telefónica, en aquellas zonas del país en donde no tiene cobertura propia. Esto significa que más de 29 millones de clientes se verán beneficiados por la medida.
Entre estos se incluyen hogares, oficinas y empresas, de las cuales 10,6 millones son de la red propia de Vodafone, y el resto será de Telefónica. “Vodafone seguirá contando con Telefónica España para completar la cobertura de sus redes de fibra óptica, manteniendo el compromiso de brindar a los consumidores servicios de redes de nueva generación en el ámbito nacional con la mejor experiencia de cliente”, según lo explica su consejero delegado, José Miguel García.
Las ventajas del acuerdo
El acuerdo permite a Vodafone reducir los riesgos de inversión y asegurar la cobertura casi total de fibra óptica en todo el país, permitiendo también reducir sus costes. Esto es una ventaja para los clientes pero también para Telefónica que recibirá importantes ingresos de dinero por el alquiler de este servicio durante los próximos años.
Además, este tipo de acuerdos ha permitido a Telefónica incrementar el grado de utilización de las redes, la optimización de la inversión y la eficiencia del despliegue. Tal como lo destacaba, José Miguel García “alcanzar sinergias maximizando el grado de utilización de las redes existentes y optimizando la inversión para ambas empresas”.
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