La Seguridad Social reconoce la incapacidad permanente a los trabajadores que por enfermedad o accidente laboral no pueden volver a su actividad laboral, ya sea de forma parcial, total o absoluta. Pero a veces salen casos donde hay personas que alegan “estar jubilados a los 21 años” y cobrar una “paguita” de la Seguridad Social.
Este es es el caso de Joel García, un joven que ha sido entrevistado en el canal de YouTube ‘Santoria Podcast’. En él, Joel habló abiertamente sobre su situación: percibe una pensión por incapacidad permanente absoluta y reconoce que, pese a superar los mil euros al mes, no le resulta suficiente para llegar a fin de mes.
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Joe es una persona que en la entrevista explica que debido a una enfermedad mental le dieron un 66% de discapacidad. Es decir, que a los 20 años le fue diagnosticado con psicosis y que de niño tenía TDH (probable referencia al TDAH) y un “grado de impulsividad”. Además, hace referencia a que padece una “esquizofrenia”, que define como “la realidad alterada”, y menciona que se medica por ello, haciendo “resets” anuales en psiquiátricos.
“Me jubilé con 21 años y tengo una paguita”
En la entrevista explica que debido a sus problemas cobra una de las pensiones, según él, “más top”, siendo esta la incapacidad permanente absoluta. Por eso y ante la imposibilidad de poder trabajar, explica que está por así decirlo jubilado. “Me jubilé con 21 años” explica con sus propias palabras. “¿Sabes? Tengo una paguita, tengo derecho a voto, ¿vale?, pero tengo una paguita que… ¿qué pasa con esa paguita? Son 1.000 euros al mes, cada año la suben como unos 40, 30 y pico, 34 así… y cobro 1.000 y bueno, en verdad no me llega ni para final de mes” explica.
Según él, el hecho de no poder trabajar hace que tenga más gastos. “Piensa que tienes mucho tiempo libre, no puedo trabajar, es absoluta, total, permanente… no sé cómo se llama, pero es de las más tops, ¿sabes?”.
“No puedo trabajar, no me adapto”
Durante la entrevista, el propio Joel reconoce que no puede trabajar debido a su enfermedad. Le preguntan “No puedes trabajar por la enfermedad que tienes, eh, claro, mental, ¿no?” A lo que Joel responde “A ver, bueno, porque no, siempre que he trabajado, no he rendido, en plan, no me gusta obedecer órdenes sobre todo, soy muy rebelde, en plan, soy puro rebelde”.
Este rechazo al mundo laboral es una constante en sus respuestas. “La paga, sí. Tú no puedes trabajar, recibes un dinero mensual del Estado… como no puedes trabajar, tienes todo el día libre, o sea, tienes 30 días al mes, 30,5 días al mes de media”.
Además, admite que esta dificultad para trabajar no es solo médica, sino también de actitud: “No me gusta nada eso de tener jefes ni cumplir horarios. Por eso me cuesta mucho adaptarme a cualquier empleo”. Así, Joel deja claro que su situación es el resultado tanto de su diagnóstico médico como de una dificultad personal para integrarse en el mundo laboral.
Sobre los trabajos que ha intentado desempeñar, Joel comenta: “He trabajado en Amazon cortando cartones, reciclando, he trabajado… en plan de los que limpian las mantas de los hoteles, pero en una fábrica, ¿sabes? Es una mierda de trabajo, en plan, ¿a quién le gusta eso? No lo hace por supervivencia, ya, eso es sobrevivir. Encima, son trabajos mal pagados, que entiendo que cobran menos incluso que con la paga, ¿no?”.
”La paga no me llega a fin de mes”
Cuándo le preguntan sobre cuánto le dura el dinero, responde que no mucho, porque tiene todo el día libre. “Claro, como no puedes trabajar tienes todo el día libre o sea tienes 30 días al mes 30,5 días al mes de media claro”.
Sobre este tema explica que el dinero una vez se lo ingresan le dura dos días. “Me dura dos días, o sea, te ingresan el 25 y el 27 no tienes. Claro y cuando cobro doble menos aún”. Sobre las pagas extraordinarias, añade: “Cuando cobras doble, menos aún, porque digo como tengo más, pues gasto más…” ¿También tenéis pagas?, le preguntan, a lo que contesta: “sí, 2.000, dos pagas dobles, 14 pagas en total, 2.000 euros cobro en julio y en noviembre, creo”.
¿Cobra realmente una incapacidad permanente?
Durante la entrevista, Joel menciona que cobra una incapacidad permanente absoluta y hace referencia que accede a ella porque tiene una discapacidad del 66%. Pero este hace mención a “que para poder acceder a la pensión por incapacidad es necesario tener mínimo 65% de discapacidad, yo tengo 66”.
Esto hace dudar de que este cobrando una incapacidad permanente y sí una pensión no contributiva de invalidez. El principal motivo es que la incapacidad permanente no exige un grado mínimo de incapacidad (si bien, una vez aprobada se suele reconocer al menos el 33%).
Las incapacidades permanentes valoran la incapacidad de poder volver a trabajar ya sea de forma parcial, total o absoluta (de ahí los grados). Por otro lado, para acceder previamente desde una enfermedad común, la Seguridad Social exige un “período genérico de cotización: la tercera parte del tiempo transcurrido entre la fecha en que cumplió los 16 años y la del hecho causante” tal y como explica en su propia página web.
En cambio la pensión no contributiva de invalidez, exige tener una discapacidad igual o superior del 65%, de ahí a su palabras “rozando el larguero” cuando alega tener el 66%. Además, mientras la absoluta es el 100% de la base reguladora, la mínima de la no contributiva de invalidez son 141,18 euros.