El padre saca 20.000 euros de las cuentas de sus hijos menores y las deja casi vacías: la justicia obliga al banco a reponer el dinero porque no tenía el consentimiento de la madre

Tras dejar las cuentas de sus hijos con apenas 10 euros, la madre pidió que el banco reembolse el dinero. La justicia le da la razón porque el banco debería haber el permiso de ambos progenitores.

Hija con su padre sacando dinero de la hucha |Canva
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La justicia ha condenado a un banco a reembolsar más de 20.000 euros por permitir que un padre retirara la totalidad del dinero de las cuentas de ahorro de sus tres hijos, menores de edad, sin la autorización de la madre. El banco francés permitió que el hombre sacara el dinero mediantes transferencias y retiradas de efectivo, pese a que ley del país exige el consentimiento de ambos progenitores para este tipo de operaciones. 

El caso ha salido a la luz a través de la prensa francesa, y según la información publicada por ‘Le Figaro, el padre de los menores de 6, 11 y 13 años transfirió inicialmente 5.000 euros de cada cuenta a la de su propia empresa y posteriormente agotó el saldo restante mediante operaciones online y retiradas en cajeros. Finalmente, dejó las cuentas de sus hijos con apenas 10 euros. 

La madre, al detectar las operaciones, acudió a los tribunales para exigir que el banco devolviera a sus hijos el dinero retirado, y ante la justicia el padre reconoció que lo había hecho para poder comprar un coche de empresa, que terminó en quiebra.

La justicia obliga al banco a restituir el dinero porque debería haber pedido el consentimiento de ambos progenitores

Tanto en primera instancia como en apelación, los jueces le dieron la razón, pero el banco recurrió la sentencia ante el Tribunal de Casación, la máxima instancia civil en Francia.

La entidad defendió que no era la responsable del uso que el padre diera al dinero de sus hijos, puesto que esté el representante legal de los menores, lo que suponía que tenía acceso legítimo al dinero de las cuentas. Además, aseguró que su deber no es intervenir en la administración de los clientes, salvo que detecte anomalías manifiestas.

El Tribunal de Casación rechazó esta postura al considerar que el banco cometió una falta al permitir la disposición de los fondos sin la autorización de ambos progenitores. En la sentencia se hizo hincapié en que las disposiciones importante del patrimonio de menores requieren un acuerdo entre los progenitores, y que en este caso el banco debería haber exigido el consentimiento conjunto antes de ejecutar las operaciones. 

Por ello, el Tribunal ordena al Crédit Mutuel a restituir el dinero retirado y abonar los intereses que se habrían generado hasta la fecha.

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