La ropa usada no para de aparecer en grandes cantidades delante de tiendas como Decathlon o Kiabi por toda Francia. Esto tiene un porqué. Es un modo de protesta de la red de empresas de clasificación de textiles usados Le Relais. Es esta compañía la que está detrás de los enormes vertidos de ropa frente a las grandes superficies comerciales.
El pasado martes 15 y el miércoles 16 de julio realizaron actividades de denuncia y suspendieron la recogida en sus terminales para pedir más apoyo al sector, que, según su dirección, corre el riesgo de desaparecer, indicó al medio AFP.
12 toneladas de ropa frente a Kiabi
En Arras (Pas-de-Calais), Le Relais arrojó 12 toneladas de ropa frente a una tienda Kiabi. Otras tiendas como Decathlon y Okaïdi también han recibido toneladas de ropa frente a sus puertas, en protesta por la degradación de las empresas que clasifican la ropa usada.
Hasta en 15 localidades se han visto acciones similares, con montones de ropa en sus puertas, y se espera que continúen en los próximos días, según declaró a AFP Emmanuel Pilloy, presidente de Le Relais Francia.
Suspensión de actividad y presión en el sector
Pero la cosa no va a quedar solo ahí, la empresa Le Relais también anunció “una suspensión total de sus actividades de recolección en el territorio”. Esto podría dejar a miles de empresas y lugares de Francia sin poder reciclar adecuadamente la ropa usada.
El principal actor de la recogida y clasificación textil en Francia pretende presionar a Refashion, la organización encargada por el gobierno de apoyar a la industria de la moda hacia una economía más circular, cuyos socios son las empresas que comercializan ropa y calzado.
Uno de los grandes motivos de los que se queja Le Relais es que no disponen de los ingresos suficientes para mantenerse y en parte es por la falta de apoyo de Refashion. No han recibido la ayuda suficiente por su parte y solicitan un aumento de la contribución a la clasificación que paga Refashion a 304 euros por tonelada de ropa clasificada, frente a los 156 euros actuales. Esta contribución se financia con unos pocos céntimos de euro que pagan los consumidores por cada prenda comprada.
Le Relais corre el riesgo de “colapsar” y cerrar
Pierre Duponchel, director general de Le Relais, acusa a Refashion de querer "asfixiar el sector de clasificación existente" en beneficio de los minoristas, que en ocasiones, como Kiabi, han lanzado su propio servicio de venta de ropa de segunda mano.
Según el Sr. Duponchel no se han hecho los cambios que demandan y Le Relais corre el riesgo de quebrar antes de que acabe el verano. El sector representa 3.000 empleos, 2.000 de ellos en Le Relais, que se podrían perder también a causa de su cierre definitivo.
En un comunicado de prensa, Le Relais insta "al Ministerio de Transición Ecológica a intervenir con firmeza".
Bajada de los precios de exportación de textiles
Refashion, por su parte, ha emitido un comunicado en el que hace un llamado a la "calma y responsabilidad", asegurando que está trabajando en la construcción de "una solución colectiva" al problema.
La organización avisa sobre "la caída repentina de los precios de exportación de textiles usados clasificados, principalmente en África", donde los consumidores optan cada vez más por adquirir prendas nuevas o de segunda mano provenientes de Asia.
Ante este contexto, Refashion ha presentado una propuesta de ayuda de emergencia que elevaría la compensación a 192 euros/tonelada, actualmente pendiente de aprobación por parte de las autoridades públicas. A pesar de la intención, Le Relais considera que dicha cifra resulta completamente insuficiente, ya que necesitan mucha más ayuda.