El Seat 600 supuso una auténtica revolución en nuestro país: la solución para motorizar la clase media española. Desde que el 27 de junio de 1957 saliera la primera unidad del 'pelotilla', hasta el 3 de agosto de 1973, fecha en que se fabricó el último, 794.406 unidades fueron matriculadas.
El precio de partida del Seat 600 en el año en que fue puesto a la venta era de 65.000 pesetas, unos 390 euros, aunque el equivalente a día de hoy serían unos 18.000 euros, aproximadamente (tres años y medio del salario de la época). Actualmente, de los 10.000 de este modelo que se encuentran en España, hay uno en concreto que está aparcado en Madrid, específicamente en la Ciudad Universitaria de Moncloa… desde hace 50 años.
El Seat 600 de la familia de Víctor Gómez
Se trata de un coche que se encuentra situado en un parking ubicado a un centenar de metros de la Moncloa, un Seat 600 de color beige que parece una escultura, ya que lleva años sin moverse del lugar. Este coche, además, oculta historias de todos los gustos que van desde un abandono inesperado a un fallecimiento repentino.
“Desde que tengo memoria hay un misterio junto al Palacio de la Moncloa. Un coche que lleva allí décadas aparcado", escribía. ¿De quién es? ¿Por qué no se mueve? ¿Pertenece a alguien de la Moncloa? ¿Vigila la carretera de A Coruña? ¿Está abandonado?”, se preguntaba un usuario de X.
Como tal y desde las informaciones surgidas en 2021 a partir del medio de El Confidencial, este Seat 600 pertenece a una familia que ha vivido y trabajado justo allí, en los terrenos de la Complutense, desde hace más de medio siglo.
Junto al coche, el protagonista de esta historia en Víctor Gómez, quien fuera contratado como guarda de los edificios de la entonces Institución de Formación del Profesorado. El puesto incluía una vivienda cercana al campus, donde crió a sus tres hijos. Cuando en 1969 se inauguró el edificio de la actual Facultad de Políticas y Sociología, Víctor fue incorporado a la plantilla de la Universidad Complutense de Madrid.
“Lo lavaba varias veces por semana, como si le fuera la vida en ello”
En 1972, ya con la familia consolidada, Víctor decidió obtener el carné de conducir. Su elección fue lógica: un Seat 600, que aquel año estaba a punto de cesar su producción. El coche se convirtió pronto en parte inseparable de la vida familiar.
Fueron sus hijos los que recordaron el esmero con el que su padre cuidaba aquella reliquia, que utilizaban en mayoría para viajar a su pueblo, Las Ventas, en Toledo. "Lo lavaba varias veces por semana, como si le fuera la vida en ello", explicaban a El Confidencial. Apenas superó los 100.000 kilómetros en todo este tiempo, pero en él llegaron a viajar hasta ocho personas por las carreteras de aquella España.
Durante décadas, el Seat 600 blanco acompañó a la familia en excursiones, viajes y tareas cotidianas. Aunque con el paso del tiempo quedó fuera de circulación, jamás fue abandonado. Tras la muerte de Víctor en 2011, su hijo Paco, conserje de la facultad, decidió restaurarlo con sus hermanos como homenaje a su padre y a la vida construida alrededor de ese coche.
El coche, un icono de la historia del automóvil en España
Ahora, después del dificultoso camino para rehabilitarlo, su hermana María Jesús confiesa que tras el paso de Filomena, la borrasca de frío y nieve que bloqueó Madrid en enero de 2021, se preocuparon mucho más de poner en marcha el clásico que otros coches familiares que tenían cerca. "¡Y arrancó sin problemas!", comentaron.
En la actualidad, entre Paco y el resto de sus hermanos cuidan el coche con esmero. Ahora ya no lo hacen, de ahí que esté aparcado en el mismo lugar, para hasta entonces salían a dar una vuelta con este Seat 600 cada fin de semana por donde aún tenían permiso para conducir la reliquia española. En 2025, eso ya no es posible.
El conserje, como le confesó a Tribuna Complutense, el medio institucional de la Facultad, tiene claro que jamás venderá este 600, del que ya ha rechazado cuantiosas ofertas por él. “Es como ver a mi padre”, decía. Como se aprecia en la imagen, su matrícula sigue siendo la de 1972, con la letra ‘D’.
Lo cierto es que ningún otro vehículo ha contribuido a la movilidad de los españoles como el Seat 600, un modelo de coche clásico e inseparable de la propia historia de España. El 600 es un icono de la historia del automóvil de nuestro país, considerado el primer turismo accesible que movilizó a la clase media española. Fue el sueño de varias generaciones para poder acceder al transporte individual y supuso un éxito comercial desde su lanzamiento: en solo cinco años se produjeron 100.000 mil unidades producidas y a lo largo de su vida, desde 1957 a 1973, se vendieron 794.406 unidades.

