Concha Velasco ha fallecido a los 84 años en el Hospital Puerta de Hierro de Majadahonda, Madrid. Sus hijos, Manuel y Paco Martínez, confirmaron su deceso el sábado 2 de diciembre a través del siguiente comunicado “Lamentamos informar de que nuestra madre, Concha Velasco, ha fallecido hoy sábado 2 a las 02:00 en el Hospital Puerta de Hierro de Majadahonda, habiendo recibido los Santos Sacramentos, a consecuencia de una complicación en su enfermedad”.
De esta forma, la reconocida actriz dice adiós, pero dejando un legado eterno. Son centenares las películas que ha protagonizado, además de haber trabajado en radio, así como en otro medios audiovisuales.
A continuación repasamos la trayectoria profesional de Concha Velasco, una mujer que cambió España.
Inicio prometedor
Concha Velasco nació un 29 de noviembre de 1939, en Valladolid, fruto de una relación entre una maestra republicana y un militar franquista. Desde muy joven, la actriz demostró desde muy temprana edad haber nacido para el mundo del espectáculo. Aunque proveniente de una familia sin antecedentes artísticos, su pasión por la actuación se hizo evidente desde su infancia. Con una personalidad vivaz y un talento innato para el baile y la actuación, Velasco se convirtió rápidamente en una figura destacada en su entorno local.
Su salto a cine empezó en la década de los 60, cuando Concha consolidó su fama con una serie de películas exitosas. Su versatilidad le permitió transitar con facilidad entre diferentes géneros, desde comedias ligeras hasta dramas intensos. Entre estas películas hay que destacar el papel que desempeñó en "Las chicas de la Cruz Roja" (1958) y "La fierecilla domada" (1965).
La chica ye-yé todoterreno que pasó del cine a la televisión, pasando por el teatro y la música
El talento, pero sobre todo su forma de ser, hizo que Concha Velasco ampliara su presencia al mundo del teatro y la televisión. En los escenarios teatrales, destacó por su participación en obras clásicas y modernas, ganándose el respeto y la admiración del público teatral.
En televisión, se convirtió en un rostro familiar, participando en series y programas que reafirmaron su talento y carisma. Su primer debut fue en el programa de TVE "Estudio 1", donde interpretó obras de teatro adaptadas para la televisión, destacándose en títulos como "La dama del alba" (1965), "La alondra" (1969), y “Don Juan Tenorio” (1966).
En la década de los 80 participo en la serie “Teresa de Jesús” (1984). También, presentó los especiales de Fin de Año de TVE entre 1985 y 1987 y participó en "La comedia musical española" (1985).
Su trabajo era tan brillante que tuvo que descartar el principal de la mítica serie “Farmacia de Guardia”, papel que luego fue interpretado por Concha Cuetos. Ya a partir de los años 2000, la actriz participó en "Las cerezas del cementerio" (2005), "Motivos personales" (2005) de Tele 5, y el breve programa "Mi abuelo es el mejor" (2006) en TVE. Para finalizar su carrera en televisión termino interpretando a Carmen Orozcola serie de "Herederos" (2008) en TVE , y apareció en "Las chicas de oro" (2010) junto a Lola Herrera, Carmen Maura y Alicia Hermida.
Pero no solo cine y tele, Concha Velasco, la polivalente, destaco como cantante. Su tema "La Chica Ye-Yé" (1965) se convirtió en un hito de la música española de los años 60.
Una de las actrices españolas más aclamadas, premiadas y trabajadoras
A lo largo de su carrera, Velasco ha recibido numerosos premios y reconocimientos. Ha sido galardonada con el Premio Goya de Honor, varios premios Fotogramas de Plata, y ha sido nominada en múltiples ocasiones a los Premios Goya por sus actuaciones en cine y televisión.
Concha ha recibido tantos premios que es más fácil terminar por lo que no ha recibido (si le queda alguno). En su carrera profesional ha recibido 140 premios, 16 discos, 83 películas, dos cortometrajes, 36 obras de teatro, 18 series televisivas. Según recogen en el País, en una entrevista que le hicieron a sus 80 años, todo este trabajo lo ha cosechado envejeciendo dignamente.
Pero si algo hay que destacar de Concha Velasco o “nuestra chica ye-yé” es un espíritu por trabajar en lo que uno quiere y cree. En varias entrevistas, la actriz cuenta que su pasión por el cine provocó el tener deudas con Hacienda. Las deudas venían de hacer algo en lo que ella creía y quería “su amor por el teatro”. Según el medio Deia “En el teatro he sido un poco despilfarradora, pero en la vida privada nunca. Han sido montajes muy caros. Las ruinas económicas siempre me han venido por los espectáculos, porque nunca me habrás visto en un casino. Nadie me habrá visto en fiestas en Marbella porque siempre estoy trabajando”.
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