Esta Nochevieja y Año Nuevo, España seguirá viviendo un episodio de frío invernal, con heladas nunca vista en años. Para este miércoles,31 de diciembre de 2025 (Nochevieja), la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) deja un mensaje claro y es, que habrá frío a primera hora, nieblas muy densas y el típico riesgo “silencioso” en carretera (hielo y placas en tramos sombríos). No se trata tanto de un gran temporal como de un cóctel muy común en situaciones anticiclónicas (cielos tranquilos, inversión térmica y humedad atrapada en valles) que complica la conducción cuando más gente se mueve por celebraciones y cenas.
En nivel amarillo (peligro bajo), la AEMET recuerda que “el peligro es bajo”, pero pueden producirse impactos en población vulnerable o en zonas expuestas, y la recomendación general es “estar atento” y seguir la información actualizada.
La AEMET mantiene avisos por niebla con visibilidades muy reducidas en varios puntos del interior, con un matiz importante para conductores, pues cuando la niebla es “engelante”, la humedad puede depositarse y congelar en el asfalto (y también en puentes y viaductos), incluso aunque no haya llovido. Esto es lo que convierte una noche aparentemente tranquila en una noche con riesgo real en carretera, sobre todo al regresar a casa de madrugada.
Así y según los datos publicados en la web de la AEMET, el foco está en la Meseta de Valladolid y la Meseta de Zamora con visibilidad prevista de 100 metros y posibilidad de niebla engelante, además del centro de Lugo y las Vegas del Guadiana (Badajoz) con visibilidad en torno a 200 metros. En una Nochevieja con desplazamientos cortos pero frecuentes, este tipo de aviso suele traducirse en más alcance por frenazos, entradas a rotondas con poca referencia visual y tramos donde el conductor se confía porque “parece que ya se ve mejor” y, de repente, vuelve el muro blanco.
La recomendación práctica para esta noche y la madrugada es muy directa y es, la de reducir velocidad antes de entrar en el banco de niebla (no dentro), aumentar distancia de seguridad, evitar adelantamientos innecesarios y usar alumbrado adecuado (cruce y, si la visibilidad es muy baja, antiniebla cuando corresponda). Y si el termómetro está bajo cero, asumir que el riesgo de hielo aumenta especialmente en zonas de valle, cercanías de ríos y tramos umbríos.
En paralelo, la AEMET activa aviso por temperaturas mínimas en el Pirineo de Lleida, con umbral de hasta -6 ºC de madrugada y primeras horas. En estas condiciones, el riesgo de placas de hielo en carreteras de montaña y accesos a cotas altas no es una teoría, es una posibilidad razonable, sobre todo en puertos, rampas y tramos poco soleados.
En la costa del Ampurdán (Girona) hay aviso por fenómenos costeros, pero en una jornada como hoy el impacto más “operativo” para la mayoría de lectores está en el interior, donde la visibilidad y el hielo condicionan la conducción.
El 1 de enero, Año nuevo sigue el frío y las nieblas
Para el jueves 1 de enero (Año Nuevo) el patrón general sigue siendo compatible con tiempo estable en la Península, con brumas y nieblas matinales en amplias zonas del interior, que tenderán a levantar conforme avance el día. Dicho de forma sencilla, la primera mañana de 2026 puede empezar con carreteras delicadas en la España interior, y mejorar a mediodía.
Aquí conviene subrayar un detalle que suele pasar desapercibido: cuando la niebla se disipa, no siempre lo hace de forma homogénea. Puede despejar en una autovía y seguir cerrada a pocos kilómetros en un valle, o reaparecer al caer la tarde. En días de celebraciones, esa variabilidad importa porque muchos trayectos se hacen “a horas raras” y con cansancio.
La llegada de la borrasca Francis a Canarias
Aunque el foco de hoy y mañana en la Península está más en nieblas y heladas, el arranque del año ya viene con un giro por el Atlántico. La AEMET prevé que Canarias empiece el 1 de enero con avisos amarillos asociados a la borrasca Francis, con rachas de viento que pueden rondar los 80 km/h y puntualmente superar los 90 km/h en cumbres de Tenerife, además de episodios de inestabilidad.
Para quienes viajen en avión o tengan conexiones con el archipiélago, esta información es relevante porque el viento y la lluvia suelen tener efecto directo en operaciones aeroportuarias y en carreteras expuestas. En la Península, el episodio más general de precipitaciones se espera ya a partir del viernes 2, por lo que mañana todavía es, sobre todo, “día de abrigo” y prudencia en carretera a primera hora.
