Trabajo alerta de un aumento en el número de 'ninis' y la subida del paro entre las mujeres jóvenes

La tasa de paro entre los jóvenes de menos de 25 años a nivel mundial se coloca en los 64,9 menores de 25 años sin trabajo. Esta, aunque es la tasa más baja desde hace 5 años, sigue suponiendo un 13% del total. Durante este año y el que viene, apunta la Organización Internacional del Trabajo (OIT) debería colocarse en el 12,8%.

Estas conclusiones aparecen en el informe ‘Tendencias Mundiales del Empleo Juvenil 2024’ en el que se hace referencia a la preocupación por el aumento del número de ‘ninis’ (ni estudian, ni trabajan). Pero sobre todo, el que las mujeres tarden más en conseguir trabajo que los hombres. Avisa, no obstante, que este panorama laboral “no es el mismo en todas las regiones” y que se ha creado más empleo en países como Asia o Emiratos Árabes.

Los hombres jóvenes siguen estando por delante de las mujeres a la hora de conseguir un empleo. Y aunque en 2023 eran similares (12,9% para las mujeres y 13% para los hombres), se ha visto una gran mejoría desde 2020 (año de la pandemia sanitaria).

Uno de cada cinco jóvenes es un ‘nini’

Este informe destaca que actualmente, uno de cada cinco jóvenes del mundo es un ‘nini’. Y en este caso, también las mujeres salen perjudicadas, con dos de cada tres que ni estudian ni trabajan. La tasa mundial de ‘ninis’ de mujeres jóvenes era del 28%, duplicando la tasa del 13% de los hombres.

Pero ¿qué pasa con los jóvenes que sí están trabajando? En estos casos, el empleo no suele ser de calidad. Sólo en pocos casos se encuentran jóvenes que están desempeñando unas tareas acordes con su formación. El informe avisa de que siguen faltando avances. “Más de la mitad de los trabajadores jóvenes tienen un empleo informal”.

En las familias de rentas altas y media - alta, los jóvenes tienen un empleo seguro y fijo. pero en aquellas en las que las ganancias son menores, sólo conseguirán empleo si se lanzan por cuenta propia o si entran en una empresa con contrato temporal.

Sueldos más bajos en todos los países de la OCDE

La subida de la inflación, con un Índice de Precios al Consumo que no deja de crecer, se ha producido un estancamiento a la baja de los sueldos nominales. En la mayoría de las economías del G20 y en los países de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), han afectado al nivel de vida de los jóvenes y los adultos. 

Al hablar de salarios de los adultos jóvenes (de 25 a 29 años) y de los adultos (a partir de 30 años), para 12 países, hay que constatar que no se registró un aumento de sueldos reales, y que incluso se apreció crecimiento en negativo.

Los aumentos más destacados se han dado en los países de ingresos medianos como el Sudeste Asiático o en Polonia. Por el contrario, los adultos jóvenes a sueldo en Australia, Brasil, Colombia, Egipto, México o España “no han visto ningún aumento en sus salarios mensuales a lo largo de esta década”.

El director general de la OIT, Gilbert F. Houngbo, ha resaltado que “ninguno de nosotros puede esperar un futuro estable cuando millones de jóvenes en todo el mundo no tienen un trabajo decente y en consecuencia se sienten inseguros e incapaces de construir una vida mejor para ellos y sus familias.

“El trabajo decente para los jóvenes está en medio de los tres ingredientes fundamentales de los que dependen las sociedades pacíficas que son la estabilidad, inclusión y justicia social”.

Siete de cada diez jóvenes siguen en casa de sus padres

Más del 70% de los jóvenes que trabajan siguen en casa de sus padres, según los datos que se han dado a conocer a través del Observatorio de Emancipación de 2023. Se ha detectado una subida en la edad media en la que abandonan la casa familiar hasta los 30 años.

La emancipación juvenil ha alcanzado una tasa del 17%. Es la mejor cifra desde 2020 aunque está lejos de lo que había antes de la pandemia y del pico al que se llegó en 2007.