El Ejército se despliega en la playa para controlar la oleada de inmigrantes en Ceuta

La zona costera por la que entraron cerca de 6.000 inmigrantes en Ceuta es tranquila. El espigón no registra más movimiento que las olas pero ahora, el paisaje ha cambiado de manera radical. Vehículos y militares, procedentes del Tercio de la Legión así como Regulares, ocupan la arena de la playa. El objetivo, controlar las entradas masivas que se han visto en las últimas horas. 

Pero no son los únicos. Efectivos de la Guardia Civil y Policía Nacional también trabajaron para controlar una crisis migratoria que, en ocasiones, se va de las manos y llena la Ciudad Autónoma de inmigrantes corriendo para esconderse.

En el caso de la Benemérita, han puesto en marcha el helicóptero para tener más control y ejercer presión que disuada a los interesados en emular a los que ya han conseguido el objetivo de pisar suelo español.

Todo esto sucede ante la mirada impasible de las autoridades marroquíes, que no hicieron nada para impedir el paso de una crisis migratoria de las más críticas de los últimos años. 

Tal y como informa El Faro de Ceuta, testigo presencial de lo ocurrido, miles de inmigrantes cruzan la frontera, ante la vista gorda de los agentes de seguridad marroquíes. El goteo incesante de personas que cruzaban a nado o caminando era incesante, por lo que el Ejército se ha visto obligado a un amplio despliegue de un alto número de efectivos en la zona costera.

Mientras que algunos, como informa la periodista Carmen Echarri, bordeaban el paso fronterizo de El Tarajal, otros se lanzaban al mar para llegar a tierra a nado. Y consiguieron el objetivo. Los mismos ciudadanos que pasaban por allí o estaban en sus balcones captaron impresionantes imágenes de los recién llegados corriendo por la arena, intentando encontrar un punto donde guarecerse ante la más que previsible llegada de los agentes de seguridad. 

Por eso, ante esta voz de alarma desencadenada por la llegada masiva de inmigrantes, los efectivos de la Policía Nacional, Guardia Civil y agentes locales, se desplegaron también siguiendo las órdenes recibidas por el Gobierno de España, que movilizó rápidamente a sus Fuerzas Armadas.

Precisamente el presidente Pedro Sánchez aseguró en un tweet que, en estos momentos, la tarea del Ejecutivo está en ayudar a controlar la situación que vive la Comunidad Autónoma. 

Más de 1.500 menores de edad

Los inmigrantes que han entrado en Ceuta de manera ilegal no son sólo adultos. Más de 1.500 menores de edad, según señalan fuentes oficiales, han pasado a España saltándose el perímetro fronterizo. Este sector de la población no sigue los mismos trámites para la devolución a Marruecos que las personas adultas, como indicó el ministro Grande Marlaska.

Muchos de ellos encontraron ya presencia del Ejército de Tierra en la costa, y en las últimas 24 horas, familias enteras, personas solas o niños consiguieron llegar a su destino. Pero no todos. Ha habido que lamentar la muerte de un hombre, fallecido mientras intentaba alcanzar la costa.

El Ejército, en la playa, intenta evitar el paso de centenares de personas, pero cada vez cuesta más. En una entrevista con Carlos Alsina, en Onda Cero, el responsable del Gobierno en Ceuta, Juan Vivas, señalaba que había mantenido una conversación telefónica con Pablo Casado, secretario general del PP, quien mostró su preocupación por lo que estaba sucediendo.

Asimismo, pedía al Gobierno de España una implicación mayor para poner freno a esta llegada masiva de marroquíes, dado que las autoridades de su país no hacen nada para impedirlo.

Por otro lado, el líder de Vox, Santiago Abascal, anunció su intención de viajar a la Ciudad Autónoma para conocer de primera mano la situación. 

El Ministerio del Interior pide que sean devueltos a Marruecos

El ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska, pide que los inmigrantes sean devueltos a Marruecos. Cuando sucedió esta primera entrada masiva comenzaron las negociaciones, y se consiguieron 1.500 retornos, tal y como señaló en RTVE el máximo representante del Gobierno en la materia. Para eso, ha enviado a Ceuta a 150 agentes de la Policía Nacional, que ayuden a que estas devoluciones sean más rápidas. 

En estos momentos, el espigón fronterizo está repleto de fuerzas de seguridad para evitar un aumento del flujo migratorio. Marlaska ha señalado que uno de los problemas está con los menores, que están “protegidos conforme a la Ley y a los tratados internacionales”. 

La delegación del Gobierno mantiene que la entrada de casi 6.000 personas de manera irregular es un acontecimiento que nunca antes se había visto en Ceuta. Pero, lo más sorprendente y en esto coinciden tanto periodistas como las fuentes policiales, es la inacción que mantienen los representantes del ejecutivo del país vecino.