Los médicos españoles, especialmente los más jóvenes, están emigrando cada vez más a países como Alemania en busca de mejores condiciones laborales, estabilidad y salarios más competitivos. La falta de oportunidades, la temporalidad y la sobrecarga asistencial en España están impulsando a toda una generación de profesionales sanitarios a hacer las maletas, generando preocupación en el sistema público por la pérdida constante de talento cualificado.
Es el caso de Rafael Zafra, joven español que terminó la carrera de Medicina el pasado año y, en vez de quedarse y hacer el MIR, decidió probar suerte en el extranjero. El destino elegido fue Berlín (Alemania), donde se llevó la sorpresa de que, como camarero, estaba cobrando el doble de lo que hubiera ganado de médico.
“Efectivamente, yo terminé la carrera de medicina el año pasado, y vi todo el panorama actual en España para los médicos, sobre todo en cuanto a las condiciones laborales. A todos nos gusta el dinero pero a mí me pesaban más las condiciones laborales y decidí que el mejor camino para mí era marcharme fuera de España y buscar trabajo de lo que fuese mientras convalidaba mi título de médico fuera”, contó durante el programa de ‘Y Ahora Sonsoles’, el pasado mes de octubre.
“No me esperaba que fuese a ganar más de camarero en Alemania que mis compañeros que se quedaron haciendo el MIR”
Rafael Zafra, en el citado medio, cuenta sorprendido las diferencias salariales entre ambos países: “No me esperaba que yo fuese a ganar más dinero de camarero en Alemania que mis compañeros que se quedaron haciendo el MIR y trabajando de médicos 70 horas a la semana”.
En concreto, de los 1.400 euros de sueldo base que hubiera ganado como médico residente, ha pasado a percibir 3.200 euros netos como camarero: “El sueldo base de médico en la Comunidad de Madrid es de 1.400 euros por la jornada laboral normal que hacemos de 40 o 37,5 horas a la semana”, explicaba, añadiendo que “a esto habría que sumarle la jornada complementaria obligatoria que tenemos los médicos de guardias”. Esto es, que sumando las guardias, a final de mes se cobra más, siendo el salario superior a esos 1.400 euros. Aunque, aun así, estaría por debajo de su salario de camarero.
No obstante, la queja de este joven no es solo sobre el salario, sino que, de hecho, se centra más en las condiciones laborales. Siguiendo con las diferencias entre ambos países, en un vídeo compartido en su cuenta de TikTok (que ha sido borrado pero que cubrió antes de su eliminación ‘Noticiastrabajo’), aseguraba que en Alemania “lo de trabajar horas extra y que no te lo paguen es la excepción y no la norma como en España”.
También manifestaba que, en su situación en Berlín, estaba ganando más “sin estar 24 horas de guardia sin dormir, atendiendo un enfermo tras otro, soportando gritos en urgencias o amenazas, trabajando jornadas maratonianas de hasta 80 o 90 horas semanales y muchas de ellas sin cotizar para la Seguridad Social”.

