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Un hombre encuentra su coche 2CV restaurado a la venta en internet después de que se lo confiscara la policía: ya está vendido y el dinero se lo queda el Estado

La policía le retiró el coche en enero tras dar positivo en un control de alcoholemia y, aunque aún no ha sido juzgado, su vehículo ya ha sido subastado y vendido.


clásico 2CV en venta
Comprado por un taller especializado en una subasta, el coche fue puesto de nuevo a la venta en Leboncoin |Captura de pantalla de Leboncoin
Francisco Miralles
Fecha de actualización:

Imagínate que, por conducir ebrio, además de recibir una multa, la policía le requisara el coche y, para colmo, lo subastara. Pues eso es exactamente lo que le ha pasado a un joven de 31 años, que se encontró su Citroën 2 CV Charleston anunciado en Leboncoin (una especie de Wallapop en Francia), tres meses después de que las autoridades se lo confiscaran por conducir bajo los efectos del alcohol. Lo más insólito es que el vehículo ya había sido subastado, sin que se hubiera celebrado aún el juicio.

Según recoge el medio Le Parisien, los hechos ocurrieron el pasado 4 de enero, cuando el joven acudió a la gendarmería de Pont-de-Roide, en el este de Francia, para recoger una citación judicial. Llegó al volante de su 2 CV, completamente restaurado en 2021. Al bajarse, los agentes le realizaron un control de alcoholemia y dio 2,3 gramos por litro de sangre. Para entenderlo un poco mejor, en España el límite legal está fijado en 0,5 gramos por litro para conductores en general, por lo que esta persona habría quintuplicado la tasa permitida si los hechos hubieran ocurrido aquí.

No era la primera vez. En 2021, ya fue condenado a un año de prisión por el mismo motivo. Desde entonces, tenía prohibido conducir vehículos sin un etilómetro antidémarrage (etilómetro con sistema de arranque bloqueado), un dispositivo que impide arrancar el coche si se ha consumido alcohol. Su Citroën no lo tenía. Alegó que su otro coche estaba averiado, pero eso no le libró de la sanción.

Coche vendido antes de juicio

El fiscal de Montbéliard ordenó la confiscación inmediata del vehículo. Dos días después, fue entregado a la Agencia de Gestión de Bienes Confiscados, dependiente del Estado. El propietario fue notificado por correo certificado, pero al no responder este, aplicaron lo que, según la normativa francesa, equivale a renunciar a cualquier recurso legal.

Por ello, el coche fue subastado por 17.000 euros, el precio que él mismo pagó en su día. Un profesional del sector lo adquirió y lo puso en venta por 2.900 euros más, en el portal Leboncoin.

Sobre si podrá recuperar el dinero, el juicio está previsto para el próximo 17 de abril. Si el tribunal lo absuelve, podrá recuperar el dinero de la subasta, pero no el vehículo. Ya ha cambiado de dueño.