La digitalización de la facturación en España tiene fecha definitiva. A partir de 2026, todos los autónomos y empresas estarán obligados a utilizar VeriFactu, el sistema de facturación verificable diseñado por la Agencia Tributaria. De esta forma lo explica la experta en ciberseguridad María Aperador en su cuenta de Instagram (@mariaperador): “Todas las facturas tendrán que enviarse en tiempo real a Hacienda y estar dotadas de un código QR. Esta medida busca que las facturas no se puedan modificar y reducir los fraudes fiscales”.
La implantación será progresiva, de tal forma que desde el 1 de enero de 2026 deberán cumplir con VeriFactu todas las sociedades mercantiles sujetas al Impuesto sobre Sociedades. Posteriormente, a partir del 1 de julio de 2026, la obligación alcanzará al resto de empresas y a los trabajadores autónomos. El objetivo, según recoge el Real Decreto 1007/2023 (que se puede consultar en este BOE), es garantizar la integridad, trazabilidad e inalterabilidad de los registros de facturación, además de combatir la evasión fiscal.
¿Qué es VeriFactu y por qué cambia la facturación?
El término VeriFactu es la denominación que reciben los nuevos sistemas de emisión de facturas verificables (artículo 16 del Reglamento). Se trata de programas informáticos certificados que deben generar automáticamente cada factura, asignarle una huella digital o hash, incorporar un código QR oficial y remitir los datos de manera inmediata a la Agencia Tributaria.
María explica que este cambio afectará a todos, sin importar el tamaño del negocio: “Da igual si eres autónomo, pyme o gran empresa… nos exponemos a sanciones graves si no lo hacemos de manera correcta”. Es importante esto, ya que no cumplir con la norma puede suponer sanciones de hasta 150.000 euros para fabricantes de software que no cumplan los requisitos y multas de 50.000 euros para empresas que utilicen programas alterados o sin certificar.
Lo interesante es que los receptores de las facturas, ya sean clientes o consumidores, podrán verificar su autenticidad mediante el código QR e incluso remitir la información a Hacienda. De esta forma aumenta la trazabilidad y el control tributario.
Aunque para muchos autónomos esta obligación puede parecer un reto, la experta señala que existen herramientas que facilitan la adaptación: “Yo me estoy preparando con la aplicación de facturación de ODOO porque me permite emitir las facturas de manera digital y enviarlas en tiempo real a Hacienda. Así puedo cumplir con el VeriFactu sin volverme loca con la burocracia y lo mejor de esto es que es gratis”.
Odoo ha integrado la funcionalidad de VeriFactu dentro de su aplicación de facturación. Esto significa que cualquier autónomo puede crear facturas adaptadas a la normativa sin coste, con la posibilidad de ampliar el servicio e integrarlo con contabilidad, ventas o inventario desde 11,90 euros al mes. De este modo, la transición a la facturación electrónica no solo garantiza el cumplimiento normativo, sino que también puede convertirse en una mejora de la gestión empresarial.
Qué exige la normativa
El Real Decreto 1007/2023 recoge cuáles son los requisitos que deberán cumplir todos los sistemas informáticos de facturación, siendo los siguientes:
- Integridad e inalterabilidad los registros no podrán modificarse sin dejar rastro
- Trazabilidad cada factura quedará encadenada con la anterior mediante huellas digitales
- Conservación y accesibilidad los registros deberán mantenerse legibles y exportables durante el tiempo que exige la Ley General Tributaria
- Código QR y leyenda “Factura verificable” cada documento deberá incluir esta marca oficial
- Remisión a la AEAT los sistemas VeriFactu enviarán automáticamente la información a Hacienda de forma instantánea y segura
Este cambio forma parte de la estrategia de modernización y digitalización impulsada por la Unión Europea y recogida en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, con el doble objetivo de reducir el fraude fiscal y ahorrar costes administrativos para empresas y profesionales.
