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Las empresas resisten y frenan el desplome de las ventas en España durante el mes de julio

Aunque el INE afirma que la actividad empresarial nacional continuó deteriorándose por cuarto mes consecutivo tras 25 meses seguidos al alza, la caída (3,8%) se moderó en julio en su tasa interanual.

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Las empresas resisten y frenan el desplome de las ventas en España durante el mes de julio EFE
Javier Martín
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Mal menor para las empresas en España, que ven cómo la caída de su nivel de actividad se amortiguó este pasado mes de julio, aunque continuó deteriorándose, según los datos del INE. Cara y cruz, por tanto, la que muestra el Índice de Cifra de Negocios Empresarial (ICNE), que mide la evolución de la cifra de negocios de las empresas y registró una caída del 3,8% en términos interanuales, lo que supone una moderación respecto al descenso del 4,9% de junio, pero también el cuarto mes consecutivo de retrocesos.

La caída de la facturación empresarial se debió principalmente al desplome del 31,2% en el sector del suministro de energía eléctrica y agua, afectado por la subida de los precios de la electricidad y la menor demanda. La industria también sufrió un fuerte descenso del 5,3%, mientras que el comercio registró una leve bajada del 0,6%. El único sector que aumentó sus ventas fue el de los servicios, con un avance del 5,4%, impulsado por la recuperación de la actividad turística y el consumo.

El sector servicios, la resistencia

Eliminando los efectos estacionales y de calendario, la cifra de negocios empresarial se redujo un 3,5% en julio en comparación con el mismo mes del año anterior, lo que supone una mejora de 2,3 puntos respecto a junio. No obstante, todos los sectores, salvo los servicios (+4,5%), presentaron tasas negativas, siendo la más acusada la del suministro de energía eléctrica y agua (-30,9%).

En términos mensuales, la facturación empresarial creció un 1,1% en julio respecto a junio, su mayor aumento desde agosto de 2022. Todos los sectores incrementaron sus ventas mensuales, destacando el comercio (+1,1%) y la industria (+0,8%). El suministro de energía eléctrica y agua mantuvo sus cifras estables.

Los obstáculos de las empresas

La situación la explican varios factores que afectaron negativamente a la actividad y rentabilidad empresarial. Entre ellos, destaca el aumento de los costes energéticos, la escasez de materias primas, la ralentización de la demanda interna y externa, y las restricciones sanitarias allá por la pandemia de la COVID-19 y cuyas consecuencias aún se arrastran. Estos elementos provocaron una caída del 0,4% en el índice de cifra de negocios empresarial (ICNE) respecto al mes anterior, y una desaceleración del 17,8% en la tasa interanual. 

Asimismo, el índice de entradas de pedidos en la industria (IEP) registró un descenso del 1,6% mensual y un crecimiento del 19,4% anual, muy inferior al 32,1% de junio. Estos datos reflejan las dificultades que atraviesan las empresas españolas para recuperar los niveles de actividad previos a la crisis, y ponen en riesgo las previsiones de crecimiento económico para el tercer trimestre del año.

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