La primera comunidad que prohibirá la circulación de los coches con etiqueta B de la DGT

Los vehículos con etiqueta B de la DGT, no podrán entrar pronto en ninguna de sus Zona de Bajas Emisiones de estas 24 ciudades de la Comunidad Autónoma.

La primera comunidad que prohibirá la circulación de los coches con etiqueta B de DGT Archivo
Francisco Miralles

Cataluña se convertirá en la primera comunidad autónoma de España en prohibir la circulación de vehículos con etiqueta B de la Dirección General de Tráfico (DGT) en todas sus Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), afectando a más de 24 ciudades en el territorio. El Govern de la Generalitat, bajo la presidencia de Salvador Illa, ha confirmado que a partir del 1 de enero de 2026, estos vehículos no podrán circular en las ZBE durante episodios de alta contaminación. Esta prohibición se ampliará a todos los días del año a partir del 3 de enero de 2028.

Aunque Cataluña es la primera comunidad autónoma en confirmar la prohibición de la circulación de vehículos con etiqueta B en sus Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), otras ciudades de España, como Madrid, San Sebastián, Bilbao, Málaga, Palma de Mallorca, Estepona y Getafe, también han anunciado restricciones similares, aunque todavía no han concretado medidas a nivel autonómico.

¿A qué vehículos afectará?

La medida afectará a turismos y furgonetas de gasolina matriculados entre enero de 2001 y 2006, vehículos diésel matriculados entre 2006 y 2014, y transportes de mercancías de gasolina o diésel matriculados después de 2006, que actualmente reciben la etiqueta B amarilla de la DGT. Según estimaciones, el 35 % del parque automovilístico en Cataluña cuenta con esta clasificación, lo que representa una gran proporción de los vehículos en circulación.

Zona de bajas emisiones ZBE

La etiqueta ambiental de la DGT es un sistema de clasificación de vehículos que implementa la Dirección General de Tráfico en España para identificar su eficiencia energética y nivel de contaminación. Esta clasificación, visible mediante una pegatina en el vehículo, permite a las autoridades gestionar y limitar el acceso a determinadas áreas en episodios de alta contaminación y fomentar el uso de vehículos menos contaminantes. Existen cuatro tipos de etiquetas medioambientales:

  • Etiqueta Cero emisiones (azul): destinada a los vehículos de cero emisiones como eléctricos de batería (BEV), eléctricos con autonomía extendida (REEV), híbridos enchufables (PHEV) con al menos 40 km de autonomía y vehículos de pila de combustible.
  • Etiqueta ECO (verde y azul): para vehículos híbridos enchufables con menos de 40 km de autonomía, híbridos no enchufables (HEV), y vehículos impulsados por gas natural o gas licuado del petróleo (GLP).
  • Etiqueta C (verde): asignada a los vehículos que cumplen con las últimas normativas de emisiones EURO, incluyendo turismos y furgonetas ligeras de gasolina desde 2006 y diésel desde 2014, así como vehículos de más de ocho plazas y pesados matriculados desde 2014.
  • Etiqueta B (amarilla): aplicada a vehículos de combustión interna que cumplen con normativas anteriores a las EURO más recientes, incluyendo gasolina, matriculados desde 2001 y diésel desde 2006.

La medida comenzará a partir del 1 de enero de 2026

La medida de prohibir la circulación de vehículos con etiqueta B de la DGT en todas las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) de Cataluña se implementará en dos fases. La primera, a partir del 1 de enero de 2026, los vehículos con etiqueta B no podrán circular en las ZBE durante los días en los que se activen los protocolos de anticontaminación debido a altos niveles de polución. La segunda fase comenzará el 3 de enero de 2028, con la prohibición será permanente, por lo que estos vehículos no podrán acceder a las ZBE de Cataluña todos los días del año, sin importar el nivel de contaminación.

El anuncio, realizado por Silvia Paneque, consellera de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, ha generado reacciones encontradas entre los ayuntamientos catalanes. Aunque la Generalitat apoya el proyecto con ayudas al transporte público, varios alcaldes y municipios han manifestado su desacuerdo, considerando que la medida puede ser demasiado restrictiva para sus residentes. Ciudades como Tarragona, Terrassa y Sabadell, entre otras, han expresado ya su preocupación por el impacto social y económico de estas restricciones.

Por su parte, Paneque ha asegurado que las nuevas ordenanzas municipales, que definirán los límites y criterios específicos de las ZBE, deberán estar listas para 2026. La Generalitat ha asegurado su apoyo a los ayuntamientos en la elaboración de estas normativas y en la implementación de los cambios necesarios, como la mejora del transporte público y las ayudas a los conductores afectados.

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