Cuando se trata de competir contra los más grandes, como es el caso de Netflix, la compañía estadounidense Amazon no ha escatimado en presupuesto. Su última adquisición ha sido la productora de cine Metro Goldwyn Mayer (MGM) por la cantidad de 8.450 millones de dólares.
El portal de venta online, ya antes contaba con un canal de streaming: Amazon Prime Video. Sin embargo, ha querido apostar por la compra de una las productoras más famosas y antiguas de Hollywood para competir contra otros canales de entretenimiento líderes como son Netflix, Disney+ o HBO.
El canal de vídeo, Amazon Prime Video, se fundó en septiembre de 2006, cuenta con 200 millones de suscripciones y está disponible en más de 200 países. Ahora, con la incorporación de los estudios MGM, la compañía de Jeff Bezos está en posesión de una inmensa biblioteca cinematográfica: 4.000 películas y 17.000 horas de entretenimiento para sus usuarios más fieles.
Hay grandes filmes como ‘Poltergeist’, ‘El Hobbit’, ‘Instinto básico’, ‘Toro salvaje’, y ‘Telma y Louis’, entre otras muchas más películas. También, incluye grandes títulos de series como ‘El cuento de la criada’ o ‘Fargo’.
Con esta entrada al mundo cinematográfico, Amazon pretende lograr el primer puesto no solo en Hollywood, sino también como canal de entrenamiento, desbancando incluso a Netflix. A su vez, a la lista de éxitos se suman otras películas como la saga del agente secreto James Bond.
Amazon y Netflix, ¿guerra entre los grandes del entretenimiento?
Amazon se posiciona como el segundo canal de ‘streaming’ con más suscriptores, solo le supera Netflix con 8 millones más de usuarios registrados. Y en los puestos inferiores se localizan, Disney+ con 104 millones y HBO con 64 millones abonados a su canal.
Unas cifras altas, y tras el inicio de la pandemia por el covid-19 ascendieron en consecuencia a la gran cantidad de tiempo que pasaba la gente en sus casas. Pero esta no es la única gran compra que ha realizado la empresa de e-commerce, pues también posee las acciones del ‘The Washington Post’, o la cadena de supermercados Whole Foods, por los cuales pagó 11.230 millones de euros en 2017.
La guerra por alimentar el fondo de los catálogos de este tipo de canales, ya se produjo cuando Disney adquirió Fox y su fondo Star. También, el propietario de HBO y Warner Media se fusionaba con Discovery. Mientras que otras plataformas como Netflix y Apple TV+ invierte en producciones de creación propia.
Amazon Prime Video, también, produce contenido propio. Pero ahora, gracias a la adquisición de una de las productoras más conocidas de Hollywood sus suscriptores subirán como la espuma. Sin embargo, no hay que bajar la guardia, pues su mayor competidor Netflix se plantea entrar en el sector de los videojuegos.
Una apuesta, a la que ya recurrió Apple con la creación de Apple Arcade. Se trata de un salto a otro terreno, pero observando los movimientos de la competencia y las demandas de los usuarios no hay oportunidad que perder si lo que se busca es ser el número de la lista.
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