El Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación ha convocado 28 plazas para entrar al Cuerpo de Traductores e Intérpretes del Estado, por el sistema general de acceso libre. Una oposición que, aunque no exige contar con el Grado en traducción, filología o similares, es especialmente interesante para los de ‘letras’, ya que pueden encontrar una salida laboral en el sector público y trabajar en esta área como funcionarios.
Según varios portales especializados en la preparación de oposiciones, el salario de los traductores e intérpretes del Estado se encuentra entre los 23.500 y 46.000 euros anuales, aunque puede variar dependiendo del órgano de la Administración General del Estado para el que se trabaje. De hecho, en el caso de los traductores del Senado, las retribuciones son ampliamente superiores.
Volviendo a la oposición, solicitan el dominio de distintos idiomas (español, inglés, francés, árabe, ruso, italiano…), pudiendo requerir una tercera lengua adicional. El desglose completo se puede consultar en las bases de la convocatoria, que se encuentran publicadas en este Boletín Oficial del Estado (BOE).
Requisitos, pruebas y cómo presentarse
El primer requisito es tener la nacionalidad española, aunque también podrán presentarse en igualdad de condiciones los siguientes españoles.
- Los nacionales de los Estados miembros de la Unión Europea.
- Los cónyuges de los españoles o de los nacionales de otros Estados miembros
- de la Unión Europea, cualquiera que sea su nacionalidad, siempre que no estén
- separados de derecho. También pueden participar los descendientes menores de 21 años o mayores de dicha edad que sean dependientes.
- Las personas incluidas en el ámbito de aplicación de los tratados internacionales celebrados por la Unión Europea y ratificados por España.
El segundo y último requisito es contar con título universitario de grado, licenciatura, ingeniería superior o arquitectura. Sobre el proceso selectivo de la oposición, consta de cuatro ejercicios eliminatorios, tratándose de los siguientes:
- Primer ejercicio. Se divide en dos fases, la primera es un test de 50 preguntas de opción múltiple, sin diccionario ni ningún otro tipo de soporte, que varía dependiendo del idioma; y la segunda consiste en una traducción, en las mismas condiciones, de un texto.
- Segundo y tercer ejercicio. Ambos consisten en pruebas distintas para cada uno de los perfiles en función de sus especificidades, aunque se trata de traducciones de textos específicos, pudiendo ser económicos, jurídicos, traducciones simultáneas de discursos, traducciones inversas o simultáneas de diálogos o similares.
- Cuarto ejercicio. Se debe desarrollar, por escrito y en castellano, tres temas que la persona aspirante deberá elegir de cuatro temas propuestos por el Tribunal incluidos en el temario. Después hay que leerlo ante el Tribunal.
Aprobada esta fase de oposición, todavía queda superior unas prácticas de seis meses de duración, que son remuneradas. En caso de estar interesado, hay que presentar la solicitud a través del servicio ‘Inscripción en Pruebas Selectivas del Punto de Acceso General’, para lo que se necesita certificado digital, DNI electrónico o sistema Cl@ve.
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