La Comunidad de Madrid incorporará a partir del próximo ejercicio una nueva deducción autonómica en el IRPF dirigida a los jóvenes menores de 30 años que compatibilizan estudios y trabajo. La medida, anunciada por la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, el pasado mes de septiembre y ya recogida en el Proyecto de Presupuestos Generales de la Comunidad para 2026, permitirá desgravar el 50% del importe de las matrículas universitarias o de Formación Profesional de Grado Superior, con un límite máximo de 400 euros anuales.
La deducción forma parte de la política de rebajas fiscales que el Ejecutivo autonómico ha incluido en unas cuentas que superan por primera vez los 30.600 millones de euros y que fueron aprobadas definitivamente por la Asamblea de Madrid el pasado 19 de diciembre. Según las estimaciones del Gobierno regional, alrededor de 15.000 jóvenes podrán acogerse a este incentivo, para el que se ha previsto un coste máximo de seis millones de euros.
Así es la nueva deducción para jóvenes que compaginan estudios y empleo
Según recoge el Proyecto de Presupuestos Generales de la Comunidad de Madrid para 2026, la deducción permitirá deducir en el IRPF el 50% de las cantidades abonadas en concepto de matrícula por estudios universitarios oficiales de Grado o por ciclos formativos de Grado Superior de Formación Profesional, con un límite de 400 euros por período impositivo.
Para poder beneficiarse de la medida, los contribuyentes deberán ser menores de 30 años y acreditar que han desarrollado una actividad laboral por cuenta propia o ajena durante al menos 300 días dentro del ejercicio fiscal, estando dados de alta en el régimen correspondiente de la Seguridad Social o mutualidad. Además, será obligatorio estar matriculado en el curso completo y que, al menos durante cinco meses, la actividad laboral coincida con el desarrollo de los estudios. La norma excluye expresamente los contratos de formación.
La deducción se aplicará sobre la cuota íntegra autonómica del IRPF y exigirá la conservación de los justificantes del pago de la matrícula, así como la documentación acreditativa tanto de la matriculación como del periodo de actividad laboral compatible con los estudios.
Un incentivo fiscal para apoyar el esfuerzo formativo y la inserción laboral juvenil
El Ejecutivo madrileño justifica la medida como una herramienta para respaldar el esfuerzo de los jóvenes que, además de formarse para mejorar su empleabilidad, contribuyen de forma activa al mercado de trabajo. En la exposición de motivos del proyecto presupuestario, el Gobierno regional subraya su apuesta por una “fiscalidad incentivadora” que permita aliviar la carga económica asociada a la formación superior sin comprometer la prestación de servicios públicos.
La nueva deducción se enmarca, además, en un contexto de incremento del gasto en Educación y Juventud dentro de los Presupuestos de 2026, que refuerzan la inversión en infraestructuras educativas, plantillas docentes y políticas dirigidas a facilitar la transición de los jóvenes al empleo. Con esta medida, la Comunidad de Madrid pretende reforzar su estrategia de atracción y retención de talento joven, uno de los ejes recurrentes del discurso económico del Ejecutivo de Díaz Ayuso.