Más allá de la oleada de consecuencias políticas, económicas y sociales que empapan a Europa después de el conflicto geopolítico entre Ucrania y Rusia desembocara en contienda bélica tras la orden militar expresa dictada por el presidente del Kremlin, Vladimir Putin, de invadir suelo ucraniano, el Gobierno afirma que España es uno de los países sobre los que está teniendo menos impacto.
"En lo que coinciden todos los organismos es que España es uno de los países menos expuestos a la agresión de Ucrania y por tanto es uno de los países para los que se prevé un menor impacto económico", indicaba la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y para la Transformación Digital, Nadia Calviño.
Asimismo, también ha instado a no realizar valoraciones y análisis prematuros de las repercusiones macroeconómicas nacionales en su breve comparecencia ante los medios antes de su entrada al Eurogrupo y precisamente poco después de que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) adelantara poco antes la afirmación que vertía poco después, que el impacto de la crisis consecuencia de la invasión de Rusia sobre Ucrania para España es “limitada”.
La energía y las cadenas de suministro, las más afectadas
Sí ha reconocido Calviño que “ya está teniendo impacto” en el consabido fenómeno de la efervescente alza del precio de las energías, con desmesurados costes de la factura de la luz o en los combustibles, y sobre los que el Ejecutivo ya baraja medidas a la espera de la reunión de la Comisión Europa los próximos días 24 y 25 de marzo. Y también en las cadenas de suministro del sector agroalimentario, consecuencia derivada de esta alza sin parangón de los precios, con el aceite de girasol o la pasta, provenientes en su mayoría de Ucrania, como ejemplos.
"Estamos actuando tanto a nivel nacional como europeo para tratar de minimizar el impacto en términos de crecimiento y de inflación", ha subrayado la ministra, que aboga por hurdir pactar medidas político-financieras homogéneas a nivel continental para aliviar los efectos bélicos en las materias primas y otros productos industriales esenciales. Calviño ha hablado de una respuesta “coordinada y europea” ya que todo cambio fiscal en el país "transfiere las fronteras nacionales y requiere de una acción conjunta y unida".
La reforma laboral, clave para la recuperación económica
No es que la reforma laboral vaya a resultar pieza clave por sí misma de la recuperación de la economía española, si no que su aprobación y validación conforme a los estándares pactados con Bruselas resulta la condición indispensable para desbloquear el siguiente tramo del Fondo de Recuperación, dotado de 12.000 millones de euros, necesarios para compensar rebajas fiscales, como se prevén, que asumirán las arcas estatales.
"Hemos hablado por supuesto de las perspectivas de despliegue del Plan de Recuperación. Todos han expresado una opinión muy favorable de la reforma laboral y del proceso de dialogo social que tenemos en nuestro país", declaraba Calviño sobre la reunión con el comisario de Economía, Paolo Gentiloni; con el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis; y con el comisario de Empleo y Derechos Sociales, Nicolas Schmit.
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