El precio de los carburantes en España sigue bajando y llega al puente del 15 de agosto en niveles mínimos de todo el verano. Así y según publica hoy el Boletín Petrolero de la Unión Europea, el litro de diésel se sitúa en 1,423 euros, tras abaratarse un 0,63% respecto a la semana anterior, mientras que la gasolina sin plomo de 95 octanos (super 95) se vende el litro a 1,483 euros tras caer 0,2%. Ambos registros son los más bajos desde mediados y finales de junio, respectivamente.
Esta bajada llega en uno de lo mejores momentos del años, donde se inicia la operación salida para el puente del 15 de agosto de 2025, una de las operaciones especiales de tráfico más intensas del año. La Dirección General de Tráfico (DGT) prevé más de siete millones de desplazamientos por carretera entre este jueves y el domingo. Para muchos conductores, la caída en los precios supondrá un alivio económico en un contexto de alto consumo de combustible.
Ahorro en el llenado del depósito
Con los precios actualizados, para esta semana llenar un depósito medio de 55 litros de diésel cuesta 78,26 euros, lo que supone 1,98 euros menos que en el mismo periodo del año pasado, cuando estaba a 80,24 euros. En el caso de los vehículos a gasolina, llenar un mismo depósito de 55 litros tiene un precio medio de 81,56 euros, un ahorro de 5,9 euros frente a los 87,45 euros que costaba en agosto de 2024.
Si miramos los datos a lo largo del año, podemos ver que en lo que va de 2025, el abaratamiento acumulado es del 2,75% para la gasolina y del 1,4% para el gasóleo. Es decir, que ambos carburantes mantienen precios inferiores a los registrados antes del inicio de la invasión rusa de Ucrania, el 24 de febrero de 2022, cuando la gasolina se situaba en 1,591 euros por litro y el diésel en 1,479 euros. El contraste es todavía mayor con los máximos alcanzados en julio de 2022, cuando la gasolina llegó a 2,141 euros y el diésel a 2,1 euros.
Las gasolineras más baratas de España
Aunque este es el precio medio a nivel nacional cabe recordar que el mismo puede varias dependiendo de la provincia o la estación de servicio en la que se realice el repostaje. El Ministerio de Industria y Turismo publica diariamente en su sede electrónica, en el apartado “precio de carburantes en las gasolineras españolas”, la información actualizada de los precios de venta en cada punto de suministro del país.
La gasolinera más barata registrada esta semana se encuentra en Maliaño (Cantabria), en la estación Ballenoil, donde el litro de gasolina sin plomo 95 se vende a 1,219 euros. Este mismo precio está disponible en otras localidades cercanas, como Camargo y Santander, en estaciones de Plenergy y Petroprix.
En Sevilla, la opción más económica corresponde a la estación Alcampo S.A., situada en la calle Ronda del Tamarguillo, donde el carburante se ofrece a 1,239 euros el litro. Finalmente, en la provincia de Valencia, destaca la estación Plenergy de La Pobla de Vallbona, que comercializa la gasolina sin plomo 95 a 1,245 euros el litro.
En cambio, la estación de servicio más barata para poner diesel se encuentra tanto en Córdoba como en Murcia capital, donde la estación Cotranco (calle Simón Carpintero, 24) y la estación UTE Estación de Murcia (calle Bolos, 4) ofrecen el litro de diésel a 0,999 euros.
En la ciudad de Cartagena (Murcia), la estación de servicio ubicada en la Avenida Trovero Marín, 3 comercializa el gasóleo A a 1,084 euros el litro, mientras que en la provincia de Tarragona, la estación Cecatrans Transport & Logistics en L’Arboç (calle Motors, 1) ofrece este carburante a 1,123 euros.
Evolución y contexto europeo
España mantiene actualmente un diferencial favorable respecto a la media comunitaria. La gasolina sin plomo de 95 cuesta 1,618 euros por litro en el conjunto de la UE y 1,667 euros en la eurozona. En diésel, las medias son de 1,540 euros y 1,567 euros, respectivamente, lo que sitúa a España varios céntimos por debajo de ambas referencias.
El precio del gasóleo lleva 128 semanas consecutivas por debajo del de la gasolina, un patrón habitual antes de la crisis energética provocada por la guerra de Ucrania. Entre agosto de 2022 y mediados de febrero de 2023, esa dinámica se invirtió, y el gasóleo llegó a ser más caro de forma continuada debido a las tensiones de suministro y la elevada demanda.
