Nuevo aviso importante del Banco de España. Teniendo en cuenta las nuevas formas de pago, las transferencias y en particular el sistema Bizum se han impuesto como uno de los métodos más utilizados. Los usamos para pagar el alquiler, pagarle a amigos, pagar clases… Y, la mayoría de veces, desde el teléfono móvil, accediendo a la página web o la aplicación de determinadas entidades. Ahora, habrá que estar atentos, porque hay un error bastante frecuente que puede salir caro.
¿De qué se trata? De las equivocaciones al escribir un dígito ya sea de la cuenta bancaria o del número de teléfono al que vamos a hacer el Bizum. Lo mismo para las cantidades donde, por ejemplo, un cero de más puede provocar una gran diferencia. ¿Dónde está el peligro? En que esos pagos son irrevocables, es decir, no se pueden deshacer.
De ese modo, en caso de que se haya cometido un error al enviar el dinero, equivocándose al poner la cantidad o el destinatario, la operación no se puede revocar, por lo que la orden con el envío de dinero seguiría llegando al banco. Eso quiere decir que no se podría recuperar el dinero, ya que la entidad bancaria no puede realizar ningún desembolso si el beneficiario al que ha ido a parar el dinero no lo consiente, o bien lo autoriza un preceptivo mandato judicial.
Errores comunes irrevocables
Con la era digital, las operaciones a distancia se han normalizado tanto que se realizan con gran agilidad. Casi que no nos paramos a pensar en lo que estamos haciendo, introduciendo rápidamente el número de cuenta (IBAN) del beneficiario para realizar una transferencia bancaria perdiendo el menor tiempo posible. Otras veces, incluso, reutilizamos transferencias que se han ejecutado anteriormente en el pasado o copiamos números de operaciones que solemos efectuar periódicamente.
Con Bizum ocurre prácticamente lo mismo: rápidamente seleccionamos el contacto dentro de nuestra agenda telefónica o bien lo escribimos manualmente, pero siempre en cuestión de poco más de un minuto. La inmediatez, obviamente, presenta la ventaja de realizar estas operaciones de forma rápida y sencilla, pero también tiene el peligro de que no nos paremos a comprobar el envío de dinero que estamos haciendo. Un error que podría acarrearnos grandes consecuencias porque no se pueden revocar dichos pagos, como se ha citado con anterioridad.
Cómo actuar en caso de error
En caso de que nos equivoquemos al escribir el número de cuenta al que va destinada la transferencia, la entidad bancaria a la que pertenezcamos deberá gestionar con el banco de la persona beneficiaria, la que ha recibido por error el dinero, la opción de recuperar dichos fondos que se han transferido erróneamente. No obstante, no existe ninguna garantía de que estas operaciones acaben en éxito.
En este sentido, la devolución del dinero depende de la voluntad del beneficiario. En caso de que sí diera el consentimiento para que la persona emisora recuperase el dinero, la entidad bancaria ya estaría autorizada para revertir la operación, devolviendo el dinero a la cuenta. Por el contrario, si el beneficiario se negara a devolverlo, decidiendo quedarse con lo recibido en la transferencia, se podría recurrir a la vía judicial por un posible delito de apropiación indebida.
¿Cuál es la conclusión? Que al realizar una transferencia o enviar un Bizum, revisemos con cuidado que todos los datos sean correctos antes de autorizar el pago o indicar la clave de seguridad. Perder un minuto en ser precavidos nos podría ahorrar un disgusto, además de que nos aseguraremos de que no vamos a perder ningún dinero.
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