La Unión Europea (UE) y Estados Unidos (EEUU) negocian ‘in extremis’ un acuerdo comercial con el que rebajar los aranceles generalizados al 15%. Este impuesto, que pesa sobre las exportaciones europeas, podría empeorar en el caso de que Donald Trump, el presidente estadounidense, impone el gravamen ya anunciado del 30% que sería efectivo el 1 de agosto.
Ha sido el comisario de comercio, Maros Sefconic, quien ha trasladado esta propuesta a los embajadores del Veintisiete. En los documentos se puede comprobar la existencia de un compromiso que aliviaría la presión de las economías europeas, sí, pero no exime completamente a la UE de nuevos problemas al comercio trasatlántico.
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En el acuerdo se contempla fijar un arancel del 15% para las ventas europeas a Estados Unidos, lo que supone incluir el 4,8% medio que ya aplica el régimen de la “nación más favorecida” como confirman a Europa Press fuentes diplomáticas consultadas. Además, desde abril, Estados Unidos está imponiendo un cargo del 10% a buena parte de los productos procedentes de la UE, entre ellos los españoles, un tanto por ciento que al principio era del 20% pero que después se rebajó para poder dialogar.
La negociación está en manos de la Casa Blanca
La negociación está ahora en manos de la Casa Blanca, que aún no se ha pronunciado. “No se puede dar por hecho este acuerdo”, señalan fuentes cercanas al Gobierno de Trump y recogidas por el medio antes citado que explican que, desde el despacho oval no se ha emitido respuesta alguna.
Esta bajada generalizada de los aranceles no afectaría a los sectores más castigados como el aluminio o el acero que mantendrían el gravamen del 50%. Precisamente esta cantidad fue la que puso en pie de guerra a los distintos países europeos.
La escalada de los aranceles comenzó con la nueva política proteccionista que comenzó, aunque de manera más tímida, en este país en el año 2018. En ese momento, la administración Trump ya comenzaba una ofensiva contra los desequilibrios comerciales con la UE. Luego llegó la crisis con la influencia de contar con una fecha límite y los posibles problemas que traería a sectores clave como la alimentación, el motor y la siderurgia.
El pack de medidas de Bruselas para plantar a Trump
Desde Bruselas, con la idea de dar una respuesta firme a la administración Trump, se han planteado una serie de contramedidas con valor de 93.000 millones de euros en importaciones norteamericanas, que van en dos listas. La primera, que está suspendida de momento, es la de los aranceles del 25% sobre los productos de EEUU valorados en 21.000 millones de euros, en represalia por las tarifas al acero y el aluminio.
La segunda, que sigue en preparación, afectaría a 72.000 millones de euros en bienes norteamericanos. Ahora, la Comisión Europea estudia la fusión de ambas rondas en una sóla medida que entrará en vigor el 7 de agosto en caso de no haber un acuerdo antes.
Además, desde la Comisión, se están dando los primeros pasos para el llamado ‘instrumento anticoerción’, que es una herramienta jurídica nunca utilizada hasta ahora que permitiría a la UE adoptar sanciones contra países que emplean la presión económica para influir en decisiones políticas.