Iberia ha comunicado que cancela la compra de Air Europa porque con las exigencias regulatorias impuestas por Bruselas, seguir con esta operación “no redundaría en beneficio de los accionistas”. Con estas palabras ha expresado y dejado clara su postura a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
IAG (International Airlines Group) ha explicado que rompe el acuerdo por el que se comprometía a adquirir el 80% restante de Air Europa a Globali. Ahora, la empresa aérea tendrá que pagar 50 millones de euros a Globalia como indemnización, según estaba pactado en el acuerdo de compra, que ahora se ha roto.
Aún así, seguirá manteniendo su participación del 20% que consiguió en agosto de 2022, en la compañía Air Europa. Ha sido el consejero delegado del grupo, Luis Gallego, quien ha señalado que “esta es la mejor decisión para los intereses de los accionistas” y que el grupo seguirá en Madrid, para competir con otros aeropuertos.
Europa ha planteado “unas exigencias muy altas”
En declaraciones a EFE, fuentes de Iberia han señalado que el problema ha venido marcado por unas altas exigencias por parte de la Dirección General de Competencia de la Unión Europea, para dar el visto bueno a la operación. Son tan altas que la aerolínea considera que la operación dejaría de tener sentido.
Aclara la agencia que la cesión a otros competidores del 52% de las rutas de Air Europa así como la garantía de que ninguna de las rutas en las que la Comisión Europea había identificado problemas de competencia se quedaban sin operador que avalase la unión.
En estos momentos, la compra estaba siendo estudiada. Las autoridades competentes tenían que dar una respuesta antes del día 20 de agosto. Pero la decisión de IAG (Iberia) de retirarse del proceso ha precipitado las cosas.
La Comisión Europea estudia la retirada
Un portavoz comunitario ha explicado a Europa Press que ahora toca evaluar si se cumplen las condiciones para certificar el abandono de la fusión, siempre cumpliendo con las exigencias de la UE.
Y en este punto, ha sido el mismo Gallego quien ha señalado que IAG ha ido al límite para que la operación "tuviera sentido" pero las propuestas no han sido satisfactorias. Estas pasaban por ceder hasta el 52% de las rutas operadas por Air Europa.
Una vez que han comunicado el abandono, la idea es no volver a intentarlo. Al menos, de momento. "A medio plazo no tenemos intención de volver a hablar de ello", ha sentenciado Gallego.
Comprar TAP, la segunda opción
Aunque queda un mal sabor de boca en la compañía, IAG pondrá ahora su punto de mira en una segunda opción que pasa por la compra de la portuguesa TAP. El Gobierno del país vecino puso en marcha un plan de privatización que se ha paralizado por la crisis que vive el país.
"IAG es una plataforma que se creó para buscar la consolidación del mercado", ha explicado Gallego, para quien consolidar este proceso es "necesario" de manera que redunde en una mejor atención al cliente.
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