Jubilarse es una de las etapas vitales más esperadas en la carrera de todo trabajador. En España, la edad de jubilación actual ordinaria está establecida entre los 65 y 66 años y dos meses, dependiendo de si se han cotizado más o menos de 37 años y seis meses. Una vez cumplidos estos requisitos legales se dispone de una pensión que se ha ido generando con las cotizaciones a lo largo de la carrera laboral. La otra opción es sacrificar cierta cuantía de esta pensión para optar a la jubilación anticipada.
Por tanto, la calidad de la jubilación dependerá principalmente del tamaño de esa hucha de las pensiones que se haya generado. Pero también se puede mirar desde el lado contario: disfrutar del ocaso de la etapa laboral en un lugar donde el coste de vida sea más reducido. Al hilo de ello, un dicho: no es más rico quien más tiene, si no quien menos necesita. Y México es uno de esos países donde el coste de vida para los jubilados es mucho menor que prácticamente en el resto del mundo.
Lo afirma el ‘International Living’, el ranking de los mejores países que albergan la llamada jubilación dorada, basada en alquileres baratos, beneficios fiscales para este colectivo y descuentos sociales, y que elabora el ‘Global Retirement Index’. Aunque también por otros muchos más motivos, como la tramitación del permiso de residencia, el coste de la vida, la acogida a los extranjeros, los servicios de salud, el desarrollo del país, el clima, la seguridad y el gobierno o las oportunidades de negocio.
México, la jubilación dorada: sus ventajas
Tras Vietman, Francia, España, Malasia, Ecuador y Colombia aparece México, una de las ciudades más recomendadas para rentabilizar la jubilación y vivir, de esta manera, de una forma más acomodada. De hecho, como afirma el propio ranking que recoge ‘La Información’, “vivir los años de jubilación en una casa colonial mexicana cercana a la playa es un sueño muy posible”.
Sus bondades, además del clima y lo reducido del precio de la vivienda, también abarcan el precio de electricidad, con un coste medio de 13 euros mensuales, o los impuestos de propiedad de vivienda, cifrados en 176 euros anuales. Incluso la cuota de internet es casi la mitad que en España, siendo en el país azteca de unos 15 euros al mes.
Pero el Programa de Descuentos para Jubilados INAPAM es uno de sus mayores reclamos. A él pueden acceder tanto ciudadanos mexicanos como extranjeros con permiso de residencia que sean mayores de 60 años. Asimismo, también son muy por debajo de la media mundial otros gastos rutinarios y cotidianos como el impuesto de propiedad de la vivienda, los descuentos en los viajes o la seguridad sanitaria privada.
Los O’Toole, un ejemplo real
Este matrimonio de jubilados canadienses de la localidad de Calgary ejemplifica el caso de México. Fieles amantes de la vida costera en general, y de la mexicana en particular, donde siempre acudían cada vez que podían, no cejaron en su empeño de trasladarse a vivir a Mazatlán, como así consiguieron finalmente una vez dejaron de trabajar.
Más que conseguirlo, lo bordaron, como señalan en un post del blog 'The Savvy Retiree'. Porque han conseguido cumplir sus sueños: exprimir al máximo la pensión por la que tanto han trabajado en el sector de la restauración de los hogares y vivir enfrente del mar por 57.000 euros. En esos 278 metros cuadrados, cinco habitaciones, y cerca de servicios como supermercado, médico y dentista viven, como ellos mismos califica, como “semiricos”.
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